En México, un promedio de 2 de cada 10 mujeres y personas menstruantes que trabajan para alguna empresa han sido víctimas de despidos, descuentos en sus salarios, bullying, entre otros actos, debido a las molestias de sus periodos.
Durante la presentación del informe Menstruación y Productividad Laboral: el Tabú que Impacta el Resultado del Negocio, la líder de marketing de Plenna, Mariana León, destacó en conferencia que los cambios hormonales y síntomas menstruales son invisibilizados o desestimados, mencionó que 81 por ciento de las encuestadas padece cólicos muy fuertes; 76 por ciento, cambios de humor o irritabilidad; 74 por ciento, cansancios; 36 por ciento, dolores de cabeza; 58 por ciento, dolores de espalda baja, y 57 por ciento, hinchazón y dolor en los senos.
- El Dato: La percepción de la cultura empresarial, en materia de menstruación, fue calificada por 52 por ciento de mujeres y personas menstruantes como baja.
La mujer añadió que lo anterior resulta ser incapacitante en algunos casos; sin embargo, las empresas e incluso el personal de salud no considera que el periodo menstrual impida realizar actividades.
“Es un poco ilógico que las personas piensen que podemos realizar las mismas tareas con la misma energía, la misma disposición, humor o temple de siempre cuando nos enfrentamos de manera silenciosa a estas molestias mes con mes”, apuntó.
Una joven, quien reservó su nombre, contó a La Razón que padece adenomiosis y que su enfermedad la impactó físicamente, así como en su estado de ánimo; además, tuvo que adecuarse a varias alternativas, como salir con un cambio de ropa extra debido al flujo abundante.
“Quería hacer las cosas que habitualmente hacía, me mentabilizaba en que eso no afectara mi día a día; sin embargo, los dolores iban siendo más fuertes e incluso con medicamento no se puede controlar.
“Varias veces sentí que necesitaba reposo y a eso se sumaba que mi sangrado era muy abundante, afortunadamente en mi trabajo me dieron chance de hacer home office”, subrayó.
La trabajadora consideró que las empresas capitalinas deben contemplar días de incapacidad en casos en que las personas padezcan síntomas menstruales fuertes, propuso que el sistema de salud debe implementar una valoración para que se considere una incapacidad, dependiendo el caso.
- 11 mil 200 pesos, estima el Copred, que gasta una mujer en toallas sanitarias en su vida
“El tema debería abordarse en los trabajos, porque yo me sentí incómoda de comunicarlo, yo sabía que había apertura, pero tampoco en ningún espacio laboral dicen que si pasamos por alguna de estas cuestiones se puede pedir el día u otras alternativas.
“Pienso que si te da una gripa es algo más normalizado, pero en las empresas no hay esa comunicación, es difícil porque incluso en el propio IMSS tu incapacidad depende del médico que te toca”, dijo.
De acuerdo con el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación en la Ciudad de México (Copred), en la capital un tercio de la población menstrúa y al año son utilizadas cerca de 200 toallas, que cuestan entre 23 y 45 pesos, según la marca.
La dependencia ha señalado que si se toma en consideración que el salario mínimo de la Ciudad de México es de 248.93 pesos, se tendrían que trabajar 45 días para adquirir todas las toallas que se requieren en la vida.
Al respecto, la directora de operaciones de Dalia Empower, Laura Manzo, comentó que es necesario que las empresas tengan apertura para integrar políticas que favorezcan a las mujeres durante sus periodos y, por consecuencia, generar mejores resultados.
“La gestión menstrual es un tema de derechos humanos, que tiene que ver con la igualdad de género, la salud, la educación, pero también con la participación económica de las mujeres. En México no existe un análisis que ponga sobre la mesa este tema”, dijo.
Ejemplo de lo anterior es que, en 2024 Morena en el Congreso de la Ciudad de México propuso una iniciativa que busca establecer que diversas instancias públicas reconozcan, garanticen y salvaguarden a todas las mujeres y se erradique el estereotipo de que la menstruación es un tema tabú. Aún no es discutida.
Laura Manzo dijo a este diario que es urgente que la iniciativa se aplique en la capital; no obstante, destacó que es una propuesta que está en la congeladora y no es prioridad para los legisladores.
“Las iniciativas no están siendo prioridad, tienen que empujarse mucho más, los tabús y los sesgos que tenemos como sociedad siguen siendo muy fuertes, incluso desde el lado médico, que son los que menos deberían tener”, sostuvo.
Los datos del informe elaborado por Dalia Empower, Plenna y Essity muestran que, al menos 35.3 por ciento de este sector trabajador dijo haber sufrido de descuentos de sus jornadas laborales, mientras que 34.1 por ciento mencionó haber sufrido discriminación.
Los datos además muestran que, a nivel nacional, 2.4 por ciento de las mujeres y personas menstruantes también han sido despedidas, mientras que a 7.4 por ciento se le ha negado un alza salarial.
Vianey sufre de endometriosis, lo que le provoca fuertes dolores y flujo muy abundante durante su periodo, comentó en entrevista que supo de su enfermedad debido a que sus síntomas detonaron hace cinco años.
“Desde que me bajó siempre me han dado cólicos muy fuertes, pero cuando tenía 22 empezó a ser demasiado, me llegué a desmayar tres o cuatro veces, otras veces tenía que hablarles a mis papás para que fueran por mí a donde estuviera porque de verdad que es algo insoportable”, compartió.
La joven expuso que con el tratamiento que le otorgaron obtuvo mejoría, pero sus síntomas no desaparecen del todo; además, dijo, durante su periodo presenta otros síntomas como acné, fatiga, dolor pélvico, además, corre el riesgo de infertilidad.
El informe revela que, del total de mujeres y personas menstruantes entrevistadas, 91 por ciento sintió que su productividad se ve afectada por las molestias de sus periodos. También, cinco por ciento dijo laborar en empresas con alguna política respecto a molestias menstruales, como licencias menstruales, flexibilidad horaria, home office o algunos permisos especiales.