Después de que se dio a conocer que la alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega mandó retirar las estatuas de Ernesto ‘Ché’ Guevara y Fidel Castro, muchas de las personas comenzaron a preguntarse en dónde estaba dicho monumento.
¿Qué pasó con las estatuas?
El pasado jueves 17 de julio se dio a conocer que se habían mandado quitar el monumento ‘Encuentro’ en el que se podía ver a Ernesto ‘Che’ Guevara y Fidel Castro sentados platicando.
¿Dónde estaban ubicadas?
Las figuras de bronce representaban a ambos líderes sentados sobre una banca, en un gesto de conversación. Se encontraban en el Jardín Tabacalera, entre las calles Ignacio Mariscal y Ramos Arizpe, justo detrás del Museo Nacional de San Carlos.
Ese punto es simbólico: ahí fue donde, en 1955, Fidel y el Che se conocieron cuando preparaban la expedición del yate Granma rumbo a Cuba.
¿Cuál es la historia de estas estatuas?
El monumento se instaló por primera vez en 2017, cuando Ricardo Monreal era delegado en Cuauhtémoc. En 2018 fueron retiradas por no contar con el permiso del Comité de Monumentos y Obras Artísticas (COMAEP).
En 2020, volvieron a colocarse en el mismo sitio tras una nueva gestión y respaldo político.
¿Por qué las quitaron ahora?
La actual alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, ordenó su retiro tras detectar que:
- No contaban con cédula oficial del COMAEP.
- No había expediente que avalara su permanencia.
- Estaban bajo custodia de un trabajador sin documentación legal.
Además, vecinos habían solicitado que se devolviera el uso de la banca y banquetas del parque, ya que las esculturas obstruían parte del paso peatonal.
¿Qué dijeron las autoridades?
Rojo de la Vega afirmó que se actuó conforme a la ley y atendiendo peticiones ciudadanas. También explicó que las estatuas fueron resguardadas y se analizará su destino final tras ser catalogadas.
Por su parte, la presidenta Claudia Sheinbaum pidió diálogo con la alcaldía para reubicar las esculturas en otro espacio, al considerar que representan un momento histórico importante para México y América Latina.
Estas esculturas no solo representaban un encuentro histórico, sino que también se convirtieron en un punto icónico para turistas, vecinos y simpatizantes. Ahora su futuro está en pausa, mientras autoridades y ciudadanos discuten cuál debería ser su lugar en la ciudad.
Hasta el momento, la Embajada de Cuba no ha dado ningún comunicado, sin embargo, se esperan diferentes reacciones tanto de autoridades como de figuras políticas extranjeras.