Hoy tiene Lex Ashton “N” una audiencia

Dudan alumnos de la seguridad en CCH Sur

Tres jóvenes del plantel coinciden en que hay desconfianza en medidas aplicadas; Uli pide la instalación de detectores de metal; piden una pena de cárcel contra el presunto agresor

En la reja del CCH Sur hay mensajes para exigir justicia para Jesús Israel “N”, ayer. Foto: Fernanda Rangel›La Razón

Estudiantes del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Sur afirman que no confían en las medidas de seguridad que plantearon las autoridades de la escuela, esto a más de tres semanas del asesinato con arma punzocortante cometido por Lex Ashton “N”, de 19 años, en contra del adolescente de 16, Jesús Israel “N”.

Fue el pasado 5 de octubre cuando las autoridades del CCH Sur, junto con las de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), respondieron al pliego petitorio en el que los estudiantes demandaron mayor seguridad.

  • El Dato: El pasado 11 de octubre, un juez dictó a Lex Ashton “N” la medida cautelar de prisión preventiva, en el Reclusorio Oriente, luego de que su audiencia inicial fuera aplazada.

Entre las medidas propuestas por la el plantel escolar para aumentar la seguridad del alumnado destacan pedir la credencial para entrar, colocar cámaras de videovigilancia, reparar y colocar más botones de emergencia y, a futuro, detectores de metales.

“En otros paros se han entregado pliegos y no pasaba nada nuevo, sólo esperaban a que pasara el paro y no se hacía nada. Ojalá en éste sí se lo tomen en serio porque casi casi ya no les tengo fe”, dijo un estudiante de tercer semestre de CCH Sur, quien se identificó como Antonio, a La Razón.

Hasta el cierre de esta edición, las clases en CCH Sur no se habían reanudado y siguen en línea; sin embargo, hay estudiantes como Uli, nombre para proteger su identidad, quienes han asistido a los recorridos organizados por la administración de la directora Susana Lira de Garay, donde se han puesto a prueba algunas de las nuevas medidas de seguridad.

  • 2 cuchillos y otras armas exhibió Lex Ashton “N” en redes previo a su ataque
  • 3 semanas han pasado desde el ataque de Lex Ashton “N” a Jesús Israel “N”

“Para entrar a algunas mesas y asambleas no han pedido la credencial, pero es a veces, porque hay veces que no. Está medio raro eso”, contó.

La alumna profundizó que también los hacen signar un registro de entrada y salida, al igual que a los profesores y trabajadores que acuden, pero el control no siempre se cumple, porque “podemos firmar la entrada y luego se nos olvida la salida, y nadie nos recuerda hacerlo”.

El estudiante de cuarto semestre, identificado como Leo, mencionó que estas medidas no hubieran servido en el caso de Lex Ashton “N”, pues ni la toma de credencial ni el registro escolar habrían detenido el crimen, por ello, considera importante que se instalen detectores de metal, aunque reconoce que esto sólo sería útil para detener a vendedores externos que ingresan a la escuela.

Leo también consideró necesario instalar más botones de emergencia y reparar los que ya no funcionan, para poder reaccionar de manera inmediata ante situaciones de violencia dentro del plantel.

Asimismo, subrayó que esto no sería integral si el departamento jurídico del CCH Sur no actúa de forma efectiva para brindar acompañamiento a las víctimas de delitos, muchas de ellas mujeres que vivieron abuso sexual.

A las medidas de seguridad, la escuela también sumó espacios de acompañamiento psicológico, pero Uli señaló que son limitados, ya que cada estudiante tiene un máximo de cinco sesiones y, según su propia experiencia, el cupo en la plataforma digital es limitado.

“Sólo tenemos cinco sesiones y aparte no hay cupo para todos. En las asambleas nos dijeron que el sistema no dejó registrarse a más personas y además no lo pueden usar los trabajadores de la escuela que también sufrieron consecuencias”, señaló Uli.

Entre quienes vivieron más de cerca la tragedia está Antonio, quien el 22 de septiembre tomaba clases en el edificio IM, de donde Lex Ashton “N” se arrojó para presuntamente huir de las autoridades universitarias.

“En el momento de la tragedia yo estuve casi casi al lado; me tocó clase en el edificio IM. Lo que más me dio miedo fueron los gritos de las chavas cuando pasó que Ashton se aventó, porque estuvieron gritando y corriendo”, relató Antonio en entrevista.

Desde ese día, confesó, su confianza en las autoridades del CCH Sur se debilitó, lo mismo que la de algunos amigos que tenían miedo de ir a la escuela por temor a ser asesinados como Jesús Israel “N”.

EXIGEN JUSTICIA. Hoy, 16 de octubre, se llevará a cabo la segunda audiencia de Lex Ashton “N” por los presuntos delitos de homicidio calificado y tentativa de homicidio. Hasta el momento su abogado, David Retes, ha argumentado que el joven estaba “fuera de la realidad” y que vivió “eventos psicóticos”.

Sobre esto, tanto Antonio como Uli y Leo, consideran que Lex Ashton “N” debe recibir sentencia por asesinato.

En particular, Antonio considera que debería pasar de cinco a 20 años en la cárcel para “aprender que lo que hizo no está bien y no está justificado por nada en el mundo”.

Los tres adolescentes también consideraron que no es válido que el equipo de defensa de Lex Ashton “N” argumente que él estaba fuera de sí o que no recuerda por qué mató a Jesús Israel e hirió de gravedad a Armando, trabajador del CCH Sur, quien intentó frenar la agresión.

Leonardo y Uli coincidieron en que el argumento de hacerse pasar por una “persona fuera de sus casillas” no es válido para Jesús Israel “N”, su familia que lo extraña, ni para Armando, quien vivirá con heridas que le recuerdan un ataque violento.