¡Conoce el proceso de producción!

Con flores de cempasúchil productores de Xochimilco pintan de naranja la CDMX

La Razón visitó el cultivo de la familia Olvera, quienes producen flores de cempasúchil desde hace más de 10 años; para esta temporada obtuvieron un total de 40 mil flores

Una trabajadora riega flores de cempasúchil del cultivo de la familia Olvera.
Una trabajadora riega flores de cempasúchil del cultivo de la familia Olvera.Foto: Omar Avalos / La Razón
Por:

La flor de cempasúchil simboliza el Día de Muertos en México, una de las celebraciones favoritas en el país y, a nivel local, Xochimilco (junto con Tláhuac y Milpa Alta) es la zona de producción más fuerte de la CDMX que involucra un trabajo en campo de 120 días para que desde el mes de octubre la Ciudad de México se pinte de naranja.

Por su color y aroma, la flor de cempasúchil engalana la temporada y es aprovechada de distintas maneras: como adorno de ofrendas, casas, calles o avenidas; como ingrediente en distintos platillos, pues sus pétalos son comestibles; como colorante para dar color a textiles; también se pueden elaborar pesticidas e insecticidas y nuestros antepasados la utilizaban para aminorar malestares por vómito o indigestión.

Quizás ya sabías de alguna de esas aplicaciones pero ¿conoces el proceso de producción de la flor de cempasúchil? para aprender más La Razón visitó el cultivo de la familia Olvera, quienes producen la flor de 20 pétalos desde hace más de 10 años y que para esta temporada obtuvieron un total de 40 mil flores, cada una con hasta 25 botones.

Conoce el proceso de producción de flores de cempasúchil en Xochimilco.
Conoce el proceso de producción de flores de cempasúchil en Xochimilco.

Flor de cempasúchil: 40 mil flores en 120 días de trabajo

Victor Peralta es ingeniero agrónomo por la Universidad Autónoma Metropolitana unidad Xochimilco pero desde los cinco años siembra plantas y flores como práctica familiar. Éste año se encargó de dotar la bitácora de trabajo para la producción 2021 de flores de cempasúchil de la familia Olvera, en donde se especifican los estrictos procesos y cuidados a emplearse durante todo el proceso.

Victor indicó que la flor de cempasúchil es muy susceptible a enfermedades por hongos y que la temporada de producción se empata con la época de lluvias, por lo que es muy importante el monitoreo diario ya que con un mal diagnóstico se corre el riesgo de que una enfermedad se disemine y acabe con todo el cultivo.

Para una producción de estas, que son 40 mil bolsas, es andar pasillo por pasillo todos los días… se dice sencillo pero es una tarea que involucra comenzar con el riego a las siete de la mañana; a las 10 con la fertilización; por la tarde el control de plagas… es una chamba de siete de la mañana a siete de la tarde durante 120 días desde julio hasta octubre

Victor Peralta, ingeniero agrónomo por la UAM-X

Victor Peralta explicó que durante octubre comienzan con la logística de distribución y que en cuestión de 10 días se vacía el cultivo. 

Las flores se distribuyen en los cuatro mercados principales de Xochimilco, que son San Luis, Madreselva, Palacio de la flor en el Deportivo Xochimilco y Cuemanco en Periférico sur, pero de ahí viajan hacia más estados del país.

Victor peralta, ingeniero agrónomo y productor de flores de cempasúchil.
Victor peralta, ingeniero agrónomo y productor de flores de cempasúchil.Foto: Omar Avalos / La Razón

Cultivos de flor de cempasúchil dan trabajo y preservan tradiciones: Fernando Olvera

Fernando Olvera, dueño del cultivo de flores de cempasúchil, platicó a La Razón que el terreno fue heredado por sus familiares y se mostró orgulloso de trabajar el campo y fomentar la labor agrícola en la zona de Xochimilco.

Ha sido una bonita experiencia por que los abuelos nos heredaron (la tierra) y sentimos que vamos mejorando día con día las producciones

Fernando Olvera, productor de plantas y flores en Xochimilco

Fernando Olvera señaló que en la producción hay 11 trabajadores y estimó que cerca de 60 personas se ven beneficiadas directamente por la labor en el cultivo, además de los trabajos que se generan indirectamente con la logística de distribución de la flor de cempasúchil.

Fernando Olvera, dueño del cultivo.
Fernando Olvera, dueño del cultivo.Foto: Eduardo Cabrera / La Razón

Por su parte, Victor Peralta resaltó que la producción de flores de cempasúchil es gracias al esfuerzo conjunto del dueño del cultivo, la bitácora de trabajo, pero sobre todo de las tareas realizadas por los trabajadores y destacó: “si no es por las mujeres no sacamos la chamba”.

Asimismo, relató que debido a la pandemia por COVID-19 hubo un cambio generacional al interior de las chinampas y que en este momento se vive una reactivación de los cultivos por parte de personas jóvenes, quienes en un inicio no sabían cómo trabajar la tierra.

Ahorita hay una reactivación y motivación de los chavos de volver a entrarle, de volver a reactivar esto. Ellos ven que si se trabaja bien si te deja para que puedas tener una vida decente y que puedas mantener a tu familia y que están reingresando es muy bonito, por que dices: Está reviviendo, no se va a perder la tradición

Victor Peralta, ingeniero agrónomo por la UAM-X

oat