Banxico, sin señales de pronta acción

Banxico, sin señales de pronta acción
Por:
  • larazon

El Banco de México optó el viernes por mantener la tasa de referencia de política monetaria sin cambio, en 4.5 por ciento; sin embargo, el contenido del comunicado mostró más de una novedad tanto en el entorno externo como en el local.

Por lo pronto, la creciente especulación respecto a la posibilidad de que el banco central estuviera por recortar la tasa de referencia en el corto plazo prácticamente no encontró resonancia en el contenido del comunicado. De hecho, podríamos decir que el comunicado mostró un tono ligeramente menos relajado respecto a las preocupaciones inflacionarias con respecto al de octubre.

Tal como anticipábamos, la lectura del Banco de México del contexto internacional mostró cambios importantes. Esencialmente, se reconoció el nuevo repunte en la aversión al riesgo a nivel internacional producto de las renovadas preocupaciones fiscales en los países de la periferia de la Zona Euro. Asimismo, lo que hasta hace un mes era manejado por el banco central local como una posibilidad, fue subrayado como una realidad determinante en el entorno financiero y económico externo: el nuevo esfuerzo de relajación cuantitativa en Estados Unidos.

Sin duda, la evaluación del escenario de actividad económica local fue uno de los más relevantes del comunicado del pasado viernes. Si bien se subrayó que la demanda agregada ha experimentado una moderada desaceleración, explicada en buena medida por el debilitamiento de la demanda externa, también se destacó que la brecha de producto se ha venido cerrando de manera relativamente rápida. Curiosamente, esto podría implicar que las presiones inflacionarias por el lado de la demanda podrían presentarse antes de lo anticipado hasta hace poco. Esto último, sin duda un mensaje no muy compatible con un escenario de recortes en la política monetaria.

 En el entorno inflacionario, se subrayó que (en línea con lo adelantado) la inflación había comenzado una tendencia ascendente, por lo menos de aquí a finales del año. Dicha tendencia, en adición a que las expectativas de inflación de mediano y largo plazo, se encuentran en un nivel superior al objetivo de 3.0%, tampoco configuran un escenario ideal de recortes en la tasa en el corto plazo -tal como se había especulado fuertemente en las últimas semanas.

Más interesante aún, la Junta de Gobierno optó por eliminar la referencia al desempeño reciente del tipo de cambio y la curva de rendimientos local que hasta octubre era incluida como parte de su descripción de las condiciones monetarias -cabe recordar que la referencia reciente al tipo de cambio (revalorándose) había contribuido a alimentar la probabilidad de escenarios de recorte en la tasa de fondeo en las semanas recientes. En este último contexto, consideramos que la omisión pudo haber obedecido al propósito de desviar los focos de atención del desempeño cambiario y de la especulación respecto a su posible peso en la función de reacción del banco central.

En este contexto, si bien el banco central local sigue teniendo recursos para enfrentar los efectos adversos del significativo ingreso de capitales del exterior a los mercados locales, por lo pronto el Banco de México ha preferido optar por un mensaje que no alimenta expectativas de inminentes acciones de política monetaria en el corto plazo. En nuestro caso, continuamos anticipando que el banco central se mantendrá sin dictar cambios en el fondeo hasta enero del 2012.

jvirgenroj@banamex.com