La reforma financiera: extraordinaria

Emilio Sánchez Santiago

Dedicado a mi amigo Edgardo Mendoza Valdés,banquero e ingeniero financiero

Después de haber leído las iniciativas de ley, presentadas por el gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto al Senado de la República, he quedado más que favorablemente impresionado por su contenido, alcance, fondo e importancia para el desarrollo del país.

La reforma financiera es un conjunto de iniciativas de ley para modificar el funcionamiento del sistema financiero, en el cual se incluyen a bancos, autoridades financieras, sociedades financieras populares, sociedades financieras comunitarias, sociedades cooperativas, banca de desarrollo, uniones de crédito, instituciones auxiliares de crédito, sociedades financieras de objeto múltiple, sociedades de inversión e instituciones y empresas participantes en el mercado bursátil.

Esta reforma propone modificar una amplia gama de leyes entre las cuales destacan la de Protección y Defensa al Usuario de Servicios Financieros, la de Ahorro y Crédito Popular, la de Instituciones de Crédito, la General de Títulos y Operaciones de Crédito, la Orgánica de cada una de las bancas de desarrollo, la de Uniones de Crédito, la de Concursos Mercantiles, la de Organizaciones y Actividades Auxiliares del Crédito, la del Mercado de Valores, la de Sociedades de Inversión, la de Protección al Ahorro Bancario y el propio Código de Comercio.

La reforma financiera es, a mi juicio, el mejor esfuerzo gubernamental en los últimos 40 años para modernizar al sistema financiero, de una manera integral, coordinada, e interrelacionada, a efecto de contar con una herramienta moderna que coadyuve al crecimiento económico de México. No cabe duda de que sus autores han dedicado mucho tiempo de calidad y esfuerzo al estudio del marco legal en el que opera el sistema financiero actual, y al análisis de las mejores prácticas en el mundo entero. Esta reforma pretende extender a México esas prácticas, dotándole de un sistema financiero eficaz, seguro, y equilibrado.

 No hay espacio en este artículo para comentar la infinidad de novedades que plantea la reforma; sin embargo se debe subrayar algunas: 1) la introducción de la figura denominada “liquidación judicial bancaria”, 2) la atención a la perspectiva de género en las disposiciones de la banca de desarrollo, 3) la continuación de la garantía del gobierno federal para respaldar las obligaciones de la Sociedad Hipotecaria Federal, 4) la prohibición expresa en la Ley de Concursos Mercantiles, a los jueces de prorrogar los periodos establecidos en la propia ley, 5) la mayor regulación y supervisión de las Sofomes, y 6) la transformación de la sociedades de inversión en Fondos de Inversión.

Una primera revisión de la posible reforma financiera deja un buen sabor en boca, y transmite la gran calidad del trabajo ejecutado por sus autores. No cabe duda que en México hay talento profesional de clase mundial en el sector público. Habiendo dicho eso, habrá que continuar analizando a fondo cada iniciativa y escuchando las opiniones de los practicantes del derecho. Falta conocer también los puntos de vista de nuestros legisladores, muchos de los cuales requerirán de apoyo para valorar esta reforma en su debida dimensión.

El broche de oro de esta reforma, es el fortalecimiento del sistema judicial especializado en derecho bancario y financiero, sin el cual la aplicación de estas posibles leyes puede tornarse ineficaz.

emsanchez@prodigy.net.mx