Menos gasto y más causantes

Junto a la fallida comparecencia del Secretario de Hacienda ante los diputados, se informa que la recaudación en lo que va del año es 20% menor que el año anterior en el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y 13% menor en la suma de Impuesto sobre la Renta (ISR) y el Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU).

Los empresarios piden la simplificación en el pago del ISR y del IETU. ¿No podría Hacienda ayudar a los causantes y diseñar un sistema de cálculo sencillo y práctico? Igualmente podría aprovecharse para ahorrar tiempo y dinero evitando declaraciones en cero para quienes no causan los impuestos.

Se pagarían mejor los impuestos y más rápido si el trámite fuera accesible.

Los empresarios también se opusieron al alza de los impuestos y cabe preguntarse ¿Durante cuánto tiempo Hacienda seguirá recurriendo al fácil expediente de cobrar más impuestos a los causantes cautivos y no enfrentará el trabajo difícil de hacer pagar a los evasores y a los informales que representan un porcentaje escandaloso de la economía nacional?

Hacienda disminuyó ISR durante años y ahora está improvisando, ya que en vez de mejorar o perfeccionar el ISR creó el IETU y ahora ya considera su desaparición, cuando lo único que causó fueron más trámites y no la recaudación esperada. El 2% del IVA es más de lo mismo.

La caída en IVA se debe a que al consumo lo afectó la crisis, las altas tasas de interés y la influenza. Todos pensamos dos veces antes de gastar y Hacienda paga las consecuencias al haber apostado a que el IVA seguiría siendo el impuesto más exitoso.

Los representantes de los partidos políticos aseguran que ellos nos defenderán y evitarán las alzas de impuestos. Recordemos que algunos “defensores” autorizaron alzas hace años con otro partido en el gobierno. Las propuestas de adelgazar el aparato burocrático encuentran críticas, pero es entre los afectados.

Las empresas privadas no aumentan sueldos porque luchan por sobrevivir, igualemos a los empleados gubernamentales o de paraestatales en esta situación. Los altos funcionarios públicos ganan un sueldo elevado y un recorte de 20% no les causaría un mal irremediable. Los viáticos y todos los gastos adicionales que realizan los funcionarios deberían limitarse al mínimo o desaparecer.

No pensemos sólo en lo inmediato, tomemos medidas definitivas, de largo plazo y empecemos a aumentar el número de personas a las que se les cobran impuestos.

fcalleja@itesm.mx

fdm