A más de tres meses del anuncio de su nombramiento como director artístico de la Compañía Nacional de Danza (CND, Erick Rodríguez, en entrevista con La Razón traza los ejes de su trabajo: fortalecer las colaboraciones con coreógrafos nacionales y extranjeros, incentivar que bailarines creen obras, retar a los miembros de la agrupación con nuevos montajes, por ejemplo, por primera vez presentarán el clásico del ballet El corsario. Además, tener más presencia en los estados del país y hacer más alianzas con universidades para llevar este arte a los estudiantes.
Cuando recientemente se anunció su nuevo cargo, Erick Rodríguez, exprimer bailarín, fue elogiado en el gremio dancístico, pero también hubo algunas voces críticas por su llegada a la dirección artística de la compañía. Sobre esto señaló: “El tiempo dirá si hice un buen trabajo o no”.
- El Dato: En 2023, Erick Rodríguez se despidió de la Compañía Nacional de Danza como primer bailarín con el ballet Onegin, en el que quiso desafiar los estereotipos en la danza.
Por lo pronto, en su gestión que empezó el 1 de febrero, se concentra en los proyectos programados para este año con un presupuesto de 28 millones de pesos: cinco estrenos de coreógrafos internacionales, incluido el del artista brasileño Juliano Nunes, en agosto próximo y siete premieres nacionales. Además de las próximas presentaciones de Coppélia.
Cuando se anunció su nombramiento, hubo muchas voces que lo aplaudieron, pero también otras críticas. ¿Qué responde a eso? No hay que tomarse los elogios muy en serio y las críticas tampoco. Acepto las críticas, son dudas razonables. A lo largo de mi vida, consciente e inconscientemente, me he preparado para desempeñar esta labor. Con el trabajo y el tiempo se demostrará si tenía o si tengo las capacidades o no. Yo considero que sí. Hace muy poco tiempo me fui de la compañía; tengo muy frescas las necesidades de los bailarines para implementar lo que me hubiese gustado a mí. Es mejorar la compañía en todos los sentidos.
¿A qué le dará continuidad y qué incorporará? Intentaré potenciar seguir colaborando con coreógrafos internacionales ya consagrados y voces que están surgiendo, dar espacio a los coreógrafos nacionales y de la compañía. Generar espacios para que los bailarines de la CND creen coreografías y que sea una especie de laboratorio de creación. Dar oportunidades a los jóvenes bailarines de probar nuevos roles y prepararlos. Por ejemplo, va a venir por primera vez Ricardo Amarantes, coreógrafo brasileño, y James Whiteside, del American Ballet Theatre, quien va a traer un dueto.
También colaborar más con maestros para mejorar el perfeccionamiento técnico de nuestros bailarines. En estos meses hemos invitado a varios exbailarines y exdirectores de la compañía a impartir clases. Vinieron Laura Morelos y Aurora Vázquez. Va a venir Sylvie Renaud en unos días. Tenemos mucho potencial. Es seguir buscando la versatilidad.
¿Cómo impulsará a los bailarines? Es dar oportunidades a los jóvenes de bailar roles para también tener cambios generacionales. Tenemos nuestros primeros bailarines y nuestras figuras ya consagradas; van a seguir teniendo su lugar y es importante que estén ahí. Pero tenemos que ir viendo, pensando a largo plazo, quiénes podrían eventualmente llegar a estos puestos. La idea es que todos puedan bailar lo más posible. Eso nos va a mantener motivados, los va a mantener entrenados y nos va a dar a nosotros también un mayor abanico de intérpretes. Igual es para el público, ver diferentes maneras de representar un personaje.
Vamos a hacer una primera colaboración con Ballet de Monterrey. Va a venir una pareja de bailarines principales a hacer Coppélia con nosotros y en octubre va una pareja de la compañía a bailar Giselle con ellos. También haremos una colaboración con el Taller Coreográfico de la UNAM. Varios bailarines van a bailar en septiembre una obra de Irina Marcano. Queremos ver, hablando de esta relación interinstitucional, si el año que viene hacemos algo conjunto con la ópera, con el maestro Marcelo Lombardero.
¿En qué otros lugares también estaría buscando presencia de la CND? Somos una compañía nacional. Este año va a ser complicado, pero intentaremos empezar a hacerlo a partir del año que viene, tener más presencia en la mayor parte de la República. A lo mejor las condiciones en un teatro no serán las óptimas para hacer una obra completa, El lago de los cisnes, pero siempre podemos adaptarnos y hacer obras de pequeños formatos, trabajar en conjunto alguna coproducción. Recientemente estuvimos en Nezahualcóyotl. Estamos en pláticas para regresar, no sé si este año o el que viene para hacer una función más grande.
¿Este año con cuántos recursos cuenta la compañía? Tuvimos asignados 28 millones de pesos.
¿Qué tanto le da para hacer lo que tiene planeado? Va a ser suficiente para todo lo que hemos soñado y planeado para este año.
Hablaba del perfeccionamiento técnico de los bailarines, ¿cuál es el estado del nivel técnico en la compañía? El nivel técnico de la compañía es bueno. Tenemos a los mejores bailarines o a la mayoría de los mejores bailarines del país. Por supuesto, hay que seguir trabajando, hay que seguir mejorando siempre. Son ciclos, hay veces que mejora, no es una línea constante. Ni siquiera en el mismo año. Somos humanos.
¿Habrá rotación de bailarines? Vamos a tener unas evaluaciones anuales con el grupo de maestros que tenemos, veremos cuál es el nivel de los bailarines, quién consideramos que puede continuar en la compañía, si es necesario hacer algún cambio o no. Todavía no está decidido. Se tiene que hacer un poco más adelante en el año.