Publica Noche negra

Pilar Quintana explora en la soledad de una mujer en medio de la jungla

Narración que borra los lindes entre realidad y fabulación, ambientado en las tinieblas de la selva del Pacífico colombiano; la protagonista enfrenta delirio, abandono y acoso

La escritora Pilar Quintana en una
sesión de fotos
La escritora Pilar Quintana en una sesión de fotos Foto: Penguin España

La narradora y editora colombiana Pilar Quintana (Cali, 1972) —Premio Alfaguara de Novela 2021 por Los abismos— publica Noche negra (Alfaguara, 2025): fábula enmarcada en la selva húmeda del Pacífico colombiano, una zona de códigos singulares en que Rosa, la protagonista, es víctima de insondables tinieblas. La autora ha conformado un diseño narrativo en que cuerpo, naturaleza y aprensión se entretejen con atinada fidelidad sensorial: los elementos del entorno proyectan percusiones de gran fuerza anímica.

Rosa y su pareja, el irlandés Gene, levantan una pequeña casa frente al mar con tablones, asbesto y pertrechos prestados. Él se ausenta unos días: ella se queda sola. El relato empieza a encumbrarse de la oscuridad sucesiva de las noches que conducen a un cosmos aislado en un ciclo lunar de cuatro jornadas —domingo a miércoles— de una cadencia emocional que va deteriorando el alma de la protagonista.

  • El Dato: La nueva novela de la escritora caleña Pilar Quintana se encuentra a la venta en formato físico y digital en sitios como Amazon, Mercado Libre y librerías físicas.

Rosa se perfila asediada por un entorno sombrío: desde una araña que descubre en la cama, hasta los soldados, peones y vecinos que pasan a hacerle cortesía: hombres que saben que Gene no la acompaña, su soledad levanta la codicia masculina: cada saludo, gesto o reverencia se convierte en amenaza potencial; la rebelde floresta que la acorrala se hace cómplice y deriva en una sospecha traicionera. El lector tiene en sus manos un relato turbador, acechante y pavoroso.

“He escrito una novela en que el paisaje, la selva, lo decide todo y se convierte en un tercer protagonista; es un ente que regula el aliento, la respiración de la protagonista asediada por una humedad perenne, el aroma persistente de la hojarasca, los insectos y la lluvia que golpea la casa. La naturaleza con su ingente potencia que fomenta la carencia afectiva de Rosa en total soledad. Inquietante el vacío que se proyecta y la asfixia. He querido suscribir los elementos que configuran el miedo como una forma de concebir el mundo”, dijo a La Razón Pilar Quintana, autora también de la popular novela La perra, traducida a más de 20 idiomas.

Algunos de sus libros
Algunos de sus libros ı Foto: Especial

¿El recelo y las dudas acompañan a Rosa? Sus gestos se columpian entre la cautela y la monomanía, entre el cuidado y el delirio. Empieza a preguntarse a sí misma si Gene la traiciona, si regresará o si los hombres de la comarca traspasarán la puerta. Llega incluso a cuestionarse la decisión de irse a vivir con Gene a un sitio en que la noche y sus enigmas definen las voluntades de vivir.

¿Temor y arrebato emocional en los gestos de Rosa? Decidí la perspectiva de la tercera persona narrativa, de un narrador externo, porque a Rosa no se le puede creer mucho por tanto miedo que percibe, dice que hay un murciélago-vampiro en la casa y nunca lo puede demostrar. Qué le pasa a ella. Transita indiscutiblemente, por momentos paranoicos.

¿La selva como un refugio sentencioso? La amenaza oscila entre lo real y la imaginación de Rosa; sí, la selva es una sentencia en la configuración de lo umbroso. Me interesaba abordar los elementos de la naturaleza como un ‘entramado ético’: la noche traza el ánimo, la luna regula la tensión discursiva y la selva dicta la temperatura emocional de la trama: esos índices delinean la novela. Hay un momento donde Rosa dice: “Nunca había visto una madrugada tan negra y quieta”.

¿Qué tanto hay de experiencia personal en esta narración? Bueno, viví durante un tiempo en el Pacífico colombiano con un irlandés, como la pareja de Rosa, quien es caleña como yo. No es un relato autobiográfico, pero se nutre de episodios de mi experiencia, de mis andanzas de mujer en busca de su confirmación.

¿Novela sobre el aislamiento de una mujer? La intención era escribir una historia de una mujer aislada en total soledad; en realidad, yo pasé tres meses sola en mi casa y sufrí mucho, los vecinos no fueron solidarios. Llevé todas esas sensaciones al terreno de la ficción y lo trasladé a la conjuración de un entorno agreste: el boscaje rebelde del Pacífico colombiano.

¿Influjo de La vorágine, de José Eustasio Rivera? Asumo los retumbos de la novela del colombiano José Eustasio Rivera donde a los personajes “los devoró la selva”. La perra y Noche negra abrevan en una franja de la novela latinoamericana selvática, donde La vorágine es una de las obras irrebatibles; pero no desdeño a Horacio Quiroga ni los ecos de Cien años de soledad, en rememoración de los personajes que se internan en la selva hasta fundar el mítico Macondo. Asimismo, me nutro de Joseph Conrad, Hemingway o Jack London, escritores que recrearon paisajes de Alaska, África, Cuba o el Congo.

Noche negra

Autora: Pilar Quintana

Género: Novela

Editorial: Alfaguara, 2025

Noche negra
Noche negra ı Foto: Especial