Los segundos se hicieron eternos: Flores

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Foto: larazondemexico

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Era el cuarto novillo de Javier Molina, en la noche de toros en la Plaza de Las Ventas, en Madrid, cuando el mexicano Sergio Flores fue atrapado por el burel que le propinó cuatro cornadas mortales... salió con vida del ruedo y ayer se informó que se recupera satisfactoriamente.

“Ha tenido una suerte tremenda, le entró aire por el cuello y empezó a echar espuma por la boca, lo que asustó mucho a todo el mundo”, señaló a El Mundo, el apoderado del torero, Antonio Pedrosa.

El parte médico firmado por el doctor Máximo García Padrós, señaló que Flores sufrió cuatro cornadas: dos en el muslo de 15 y cinco centímetros, otra en los testículos y el pene y la más grave de 15 centímetros en el cuello, que lastimó la carótida, la tráquea y las venas yugulares.

Flores, pese a intenso dolor platico con el diario español y recordó el duro momento: “yo sólo pensaba en escaparme de allí, pero el novillo me atrapaba una y otra vez. Me dio por todos lados y los segundos se hicieron eternos. Noté un golpe seco pero no pensé que me hubiera atravesado el cuello como me han dicho los médicos”, dijo el matador.

“Con los calmantes lo aguanto mejor, pero de las cuatro cornadas que he recibido en mi vida, con ésta es con la que peor lo estoy pasando”, compartió el mexicano que dijo que intentará recuperarse lo más pronto posible para volver a los ruedos.