En una carrera definida por un Safety Car en las últimas vueltas, McLaren hizo el 1-2 en el podio del Gran Premio de España de Fórmula 1 con Oscar Piastri y Lando Norris, quienes se mantienen primero y segundo, respectivamente, del campeonato de pilotos con tan sólo 10 puntos de ventaja.
El australiano tiene 186 puntos, mientras que el británico 176, para lo que pinta ser una campaña cerrada entre compañeros por la lucha del título. Con su conquista en suelo calatán, Oscar Piastri llega a siete victorias en la F1, con cinco de ellas conseguidas en la presente campaña.
El tercer lugar del podio fue para Charles Leclerc, quien cruzó delante de George Russell y de Max Verstappen, quien pasó la meta en quinto, pero por una penalización tras un choque fue relegado hasta la P10 y sumó 11 puntos de penalización en su superlicencia.
En la vuelta 55 el novato Andre Antonelli se salió de la pista y provocó Safety Car, lo que generó un cierre de locura, pues Piastri, Norris y Verstappen, quienes eran los tres primeros de la carrera, entraron a pits para cambiar de llantas y agotar sus opciones buscando el mejor resultado posible.
Las acciones se relanzaron en la vuelta 60, con los carros muy juntos, y con Verstappen en duros, perdió la posición ante Charles Leclerc, quien logró meterse de manera limpia en el podio, desplazando al holandés hasta el quinto puesto.
Pues a Max Verstappen le pidieron entregar la posición a George Russell, quien pasó al cuarto puesto pese al gran enojo del elemento de Red Bull, quien tuvo un duro castigo por la colisión con el británico de Mercedes.
Piastri fue el piloto que arrancó desde la pole, con su compañero Norris saliendo desde el inicio, liderato que los volantes de McLaren perdieron momentáneamente ante Max Verstappen, quien poco a poco dejó ir la superioridad en la cita.
En un momento de la carrera Verstappen fue el puntero del GP de España, pero no pudo sostener el ritmo de ataque para poder competir palmo a palmo con los pilotos de McLaren, que vuelve a dar una demostración de poder en sus monoplazas.
El Gran Premio de España permitió que los pilotos tuvieran adelantamientos, las paradas en pits permitieron ver una dinámica distinta, con pilotos entrando a boxes dos o hasta tres veces, lo que generó una cita entretenida, con posiciones cambiantes, muy diferente a lo visto en Mónaco la carrera pasada.
Pese a que Max Verstappen demuestra semana a semana que es un piloto excepcional, sacándole jugo a su monoplaza, Red Bull no pude darle al neerlandés ese carro que le permita alcanzar el ritmo de McLaren, además que su compañero de equipo no responde a las exigencias.
El año en Red Bull empezó con Verstappen y Liam Lawson como los pilotos principales en la F1, pero el bajo nivel y un rendimiento pobre del neozelandés hicieron que la escudería austriaca lo cambiara con pocas carreras disputadas y su lugar lo tomó el japonés Yuki Tsunoda, quien está lejos de los tiempos del neerlandés.
En el GP de España el volante nipón quedó fuera de la zona de puntos, lo que complica la cuota de Red Bull en el campeonato de constructores, en donde McLaren, Ferrari y Mercedes son más fuertes.
Ésta pudo ser una de las últimas citas en el Circuito de Barcelona-Cataluña, pues el torneo en suelo catalán tiene contrato hasta el próximo año con la F1, pero con la adición de una carrera en Madrid en 2026, la carrera que se celebra en Barcelona desde 1991 podría desaparecer.
El GP de Madrid será otra carrera con un circuito urbano temporal y el año pasado se anunció que la capital española tendrá su parada en el calendario con una pista callejera temporal.
Las negociaciones del GP de España, en el Circuito de Barcelona-Cataluña, siguen en marcha para una renovación hasta 2027, de acuerdo con Miquel Sàmper, quien es presidente del Circuit de Barcelona.
