La música volvió a tomar la pantalla con fuerza durante la edición 2025 de los MTV Video Music Awards, celebrada en la UBS Arena de Elmont, Nueva York, en una gala que combina el poder de las nuevas estrellas con la reverencia a leyendas que han marcado generaciones. La indiscutible protagonista de la velada fue Lady Gaga, quien se alzó con cuatro estatuillas, incluyendo el reconocimiento a la Artista del Año.
Fiel a su estilo, Gaga apareció con un vestido monumental de Marc Jacobs, dramático y casi escultórico, que contrastó con la sencillez de sus palabras al recibir el premio mayor. La artista, que se encontraba en plena gira Mayhem, dedicó un mensaje de gratitud y reflexión sobre el papel del arte en tiempos convulsos: “Ser artista es una disciplina, un oficio creado para entrar en el corazón de alguien, donde crece y le recuerda que debe seguir soñando. Ser artista es la responsabilidad de hacer sonreír, bailar, llorar y liberar al público en cada instante”, resaltó emocionada.
Por su parte, la gran diva de la balada y el pop, Mariah Carey, recibió el Michael Jackson Video Vanguard Award,un reconocimiento que la consagra como una figura que cambió la industria audiovisual y musical. “Este premio es un recordatorio de que cada video, cada canción y cada nota forman parte de una historia compartida con ustedes, mi público. Gracias por acompañarme en este viaje eterno”, expresó.
Ariana Grande le rindió homenaje interpretando un medley de grandes éxitos, antes de que la propia Carey subiera al escenario. La protagonista de Wicked, también fue de las grandes protagonistas de la noche, al levantar cuatro de los premios más esperados: Video del Año, Mejor Canción Pop, Mejor Artista Pop y Mejor Video Pop por su tema “Brighter Days Ahead”. Quien no se quedó atrás fue Sabrina Carpenter, con tres premios y un show que dejó huella en el escenario.
El acento latino estuvo marcado por Ricky Martin, quien se convirtió en el primer artista en recibir el Latin Icon Award, un reconocimiento que celebra su aporte a la cultura musical y a la expansión global del pop latino. En el escenario interpretó un medley vibrante con temas como “Livin’ la vida loca” que marcaron su carrera, en un repaso de más de dos décadas de éxitos.
Ricky, conmovido, agradeció a MTV y al público que lo ha seguido durante estos años desde su recordada primera aparición en los VMAs:“Recibir este premio aquí, en el mismo escenario donde hace 25 años canté por primera vez, es cerrar un círculo y abrir otro. La música latina no es una moda, es un corazón que late en el mundo entero”. Shakira por su parte, se llevó el reconocimiento a Mejor Video Latino del Año, por la canción “Soltera”.
Uno de los momentos más emotivos de la noche fue el homenaje a Ozzy Osbourne, leyenda del metal y figura inigualable de la cultura rock. La ceremonia presentó un tributo encabezado por Steven Tyler, Joe Perry, Yungblud y Nuno Bettencourt, quienes interpretaron piezas icónicas como “Crazy Train” y “Mama, I’m Coming Home”.
Las imágenes de archivo proyectadas, sumadas al rugido de guitarras en vivo, crearon un instante de comunión entre generaciones, recordando el legado irreverente y eterno del llamado Príncipe de las Tinieblas.