Tras su paso por importantes Festivales de Cine como los de San Sebastián (España) y Morelia (México), Divorciados (Ex-Husbands) se encuentra en cines mexicanos, motivo por el cual su director y guionista, Noah Pritzker, visitó nuestro país. En entrevista con La Razón, el realizador estadounidense reveló cómo fue hacer su película y compartió aquello que le inspiró a contar la historia que plasma en la cinta ambientada en Tulum.
- El Dato: La película se estrenó en cines del país el 4 de diciembre. Aborda la complejidad de los lazos familiares y la búsqueda de identidad a través de la crisis emocional del protagonista.
“Pensaba en casarme casi al mismo tiempo que mis padres se separaban y, al ver estos dos acontecimientos vitales, uno al lado del otro, me di cuenta de lo absurdo que resultaba que ocurriera al mismo tiempo”, explicó acerca del curioso origen de la trama alrededor de la cual gira su película. Después compartió que, al tener clara esa idea, lo que le interesaba era contarla desde la perspectiva de un hombre mayor y no de alguien de su propia edad.
Peter Pearce, el protagonista de Divorciados, es un dentista que enfrenta el final de su matrimonio y el de sus padres, mientras está en puerta la boda de su hijo.
- 99 minutos de duración tiene la película de Noah Pritzker
“Aunque las circunstancias de Peter (el personaje principal) eran muy diferentes a las de mi padre, me resultaba interesante la idea de que él estuviera a sus 70 años sintiéndose como un niño que se tambalea mientras se encuentra atrapado entre sus padres, envejeciendo, y pasando por sus propios problemas, así como sus hijos lidiando con sus cosas”, compartió.
Igualmente explicó que, al plantearse la premisa, lo siguiente en su proceso fue plasmarlo en páginas y luego encontrar a quienes interpretarían a sus personajes. Agregó que eligió a Griffin Dunne, conocido por su papel de Jack en Un hombre lobo americano en Londres, pero pausaron la producción por el Covid; sin embargo, dijo, esto le dio oportunidad de pensar en el guion con Griffin como Peter. “Él ha pasado por divorcios, perdió a sus padres y tenía un hijo, tuvimos muchas conversaciones sobre su personaje y la historia que íbamos a contar, pude aprovechar mucho de eso mientras reescribía”, reveló.
“Comenzamos el casting en torno a Griffin como Peter, le enviaba grabaciones, le decía en quién estaba pensando para los papeles que faltaban y él opinaba, luego con el elenco ya completo tuvimos la oportunidad de venir a México con todos para filmar, algo que le dio una textura y una vida completamente nuevas a la película”, añadió. Primero, en Ciudad de México, prepararon la película, y luego acudieron a los Estudios Churubusco para el rodaje, señaló.
Para el director, otra ventaja de filmar en México fue poder contar con Nicolás Celis (Roma) como productor. Al respecto comentó que “Nico realmente ayudó a navegar la película que nos propusimos hacer aquí y creo que él tiene una capacidad increíble para comprender lo que quiere un cineasta”. Resaltó el apoyo y flexibilidad de su colega, y cómo eso tal vez no habría sido posible tenerlo en Estados Unidos”.
Noah Pritzker aborda su historia sobre la pérdida como una comedia dramática y esto se debió en gran parte a que Peter, desde un inicio, le pareció un personaje un tanto tragicómico.
“Hablé con Griffin sobre encontrar lo que le parecía auténtico de su personaje en cada momento, sabíamos que no queríamos que fuera sólo un tipo triste, pero tampoco queríamos que fuera un bufón, ni que se tomara lo que le pasaba como si fuera algo de broma.
“Quería que esta película fuera como es la vida: cursi, divertida, triste, frustrante, absurda y, con suerte, con momentos alegres”, finalizó Noah Pritzker .


