Adiós al sex symbol de los 70

Raquel Welch, quien tras emerger del mar en un revelador bikini en la película Un millón de años a. C., se convirtió en un símbolo sexual internacional de las décadas de 1960 y 70, murió ayer a los 82 años.

Falleció tras una breve enfermedad, detalló Stephen LaManna, de la agencia de talento Innovative Artists.

El papel revelación de Welch llegó en 1966 con la historia prehistórica Un millón de años a. C., en el que tenía un total de tres diálogos. Ataviada con ese bikini marrón, logró esquivar pterodáctilos, pero no el ojo del público. El filme fue rodado en las Islas Canarias y la presentaba como la “primera mujer en bikini de la humanidad”.

“Yo pensaba que era una película épica de dinosaurios boba que íbamos a dejar debajo del tapete un día. Error. Resultó que yo era la Bo Derek de la temporada. La chica en el vestido de piel de la que todos decían ‘por dios, qué cuerpo’ y que esperaban que desapareciera de un día al otro”, comentó la actriz en 1981, en entrevista con AP.

Interpretó a Lust (Lujuria) para el equipo de comedia de Peter Cook y Dudley Moore en el largometraje Bedazzled y a una agente secreta en la sátira de espías Guapa, intrépida y espía, ambas del año 1967.

Sus curvas y belleza capturaron la atención de la cultura pop, por lo cual la revista Playboy la declaró “la mujer más deseada” de la década de los años 70, a pesar de nunca haber estado completamente desnuda en la publicación.

En 2013, alcanzó el segundo puesto de la lista de “Las mujeres más sensuales de todos los tiempos” de la revista Men’s Health. Su fama fue tal que en la película Sueños de libertad, el protagonista Andy Dufresne usa un afiche de Welch para cubrir un túnel por el cual escapa de prisión, luego de usar imágenes similares de Rita Hayworth y Marilyn Monroe.

Además de actuar, Welch se desempeñó como cantante y bailarina. Sorprendió a muchos críticos y tuvo reseñas positivas, cuando protagonizó el musical de 1981, La mujer del año en Broadway, como reemplazo de Lauren Bacall durante sus vacaciones. Después, en 1997 regresó a Broadway para un montaje de Victor/Victoria.

Sabía que algunas personas no la tomaban en serio por su imagen, por lo que llegó a declarara AP en 1993: “No soy Penny Marshall ni Barbra Streisand. Ellos dicen: ‘¿Raquel Welch quiere dirigir?, Por favor’”.

Welch, cuyo nombre verdadero era Jo-Raquel Tejada, nació en Chicago y creció en La Jolla, California. Su padre era Armando Carlos Tejada Urquizo, un ingeniero aeroespacial originario de Bolivia y su madre era estadounidense, Josephine Sarah Hall. El Jo en el nombre de Welch es una abreviatura del nombre de su madre.

Era mamá y estaba divorciada cuando conoció al exactor convertido en agente de prensa, Patrick Curtis.

“La ironía de todo esto es que a pesar de que la gente pensaba en mí como símbolo sexual, en realidad, ¡yo era una madre soltera con dos hijos pequeños!”, escribió en su autobiografía, Raquel: Beyond the Cleavage.

Curtis se convirtió en su mánager y segundo esposo, la ayudó a convertirse en una chica glamurosa con cientos de portadas de revistas y múltiples películas, además de videos de ejercicio y libros de bienestar como el recordado The Raquel Welch Total Beauty and Fitness Program.

Aunque apareció en películas explotadoras, también sorprendió a muchos en la industria con actuaciones refinadas, incluyendo Los tres mosqueteros, adaptación de la obra homónima de Alejandro Dumas realizada por Richard Lester, que le valió un reconocimiento en los Globos de Oro . También fue nominada en estos mismos premios de cine, pero en 1988, por la película para televisión Derecho a morir.

Se casó y divorció cuatro veces, le sobreviven sus hijos Damon Welch y Tahnee Welch, quien también es actriz.