Sin ofrecer pruebas, el gobierno de Estados Unidos tuvo que recurrir al argumento de que México no hizo lo suficiente en combate a las drogas y, en su decisión de aplicar aranceles generales a partir del 4 de marzo, desdeñó los logros en materia de migración.
El país vecino ya no hizo mención de que, en gran medida por las acciones del Gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum, los flujos de personas alcanzaron su nivel más bajo en los últimos siete años, con una reducción en enero del 80 por ciento en comparación con el mes pico, diciembre del 2023, y del 36 por ciento en comparación con diciembre pasado.
- El Dato: El Gobierno del presidente Trump anunció ayer que planea reabrir un centro de detención para migrantes cerca de Nueva York con capacidad para mil personas.
De acuerdo con los propios registros mensuales estadounidenses de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), agentes de ese país detuvieron en la frontera sur de su territorio a 61 mil 465 personas en enero pasado, mientras que en diciembre del 2023 alcanzó su máximo nivel, con 301 mil 981 personas arrestadas, y en diciembre del 2024 se dieron 96 mil 035 aprehensiones, lo que refleja la drástica disminución de personas que ingresaron ilegalmente a Estados Unidos.
Las medidas restrictivas a la migración anunciadas el 20 de enero por Donald Trump, pero también el reforzamiento de la frontera norte de México, con 10 mil elementos de la Guardia Nacional, disuadieron a las personas migrantes, que optaron por regresar a sus países y, en otros casos, permanecer en México.
El envío de 10 mil uniformados a 18 ciudades fronterizas mexicanas comenzó inmediatamente después de que el mandatario estadounidense anunciara el incremento de aranceles y, tras un diálogo con Claudia Sheinbaum, la Presidenta actuó enviando a los efectivos, lo que permitió que el republicano pausara por un mes la aplicación de un arancel general de 25 por ciento a las importaciones mexicanas.
Detener los flujos migratorios fue una exigencia reiterada de Trump a México, lo que todo indica que se está cumpliendo, pues aunque el Gobierno mexicano no ha difundido sus estadísticas, los albergues de la zona fronteriza permanecen sin sobresaltos.
Además, el Gobierno mexicano accedió a las peticiones de Trump para actuar como país “puente” o destino de migrantes expulsados de territorio estadounidense, como parte de su plan de deportaciones masivas, por lo que el país ha recibido no sólo a mexicanos deportados por Estados Unidos, sino a personas extranjeras.
Incluso, Michael W. Banks, jefe de la Patrulla Fronteriza, hizo público ayer que desde la toma de posesión del presidente Trump, mil 650 migrantes ilegales mexicanos han sido deportados al interior de México en 14 vuelos de expulsión del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Tampoco en la frontera sur hay mayores problemas. “No hay caravanas, no ha habido caravanas desde que llegó Donald Trump; no ha habido migrantes. Lo que veo es gente muy desorientada y preocupada, y el tema arancelario es una herramienta de presión a México, por el tema de seguridad, pero el Gobierno ha cumplido su palabra al menos en migración”, señaló a La Razón Eunice Rendón, experta en el fenómeno migratorio.
Y Stephanie Brewer, experta en política migratoria y representante de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA), sostuvo que el Gobierno mexicano ha llevado a cabo acciones “inéditas” y sostenidas de contención de la migración, deteniendo a cifras récord de personas migrantes.
“En 2024, observamos un patrón en el que las autoridades mexicanas transportan en autobuses a muchas personas migrantes desde el norte del país de regreso al sur, obligándolas a reiniciar un ciclo interminable de intentos por cruzar el país.
“Observamos el nivel de énfasis en este tema dentro de la relación bilateral, el nivel de presión por parte de Estados Unidos, la respuesta de México y el grado en que México ya está cooperando con Estados Unidos en esta agenda. Parece el momento menos lógico para afirmar que es necesario utilizar una amenaza arancelaria tan severa para obtener cooperación”, dijo.

Señaló que, a finales del 2024, Trump anunció su intención de imponer aranceles del 25 por ciento a productos mexicanos y canadienses.
“Supuestamente, estos aranceles fueron anunciados como una medida para motivar a esos países a detener el flujo de drogas ilícitas a través de las fronteras y frenar la migración indocumentada. Había muchas razones para dudar de que la intención fuera implementar los aranceles, ya que este tipo de medidas tendrían un impacto negativo en ambos lados de la frontera en términos comerciales, y podría incluso aumentar la migración”, dijo.
La experta apuntó que en ese momento, parece que esta amenaza arancelaria contra nuestro país es más una táctica para llamar la atención y enviar un mensaje de dureza, “con la intención de luego anunciar una supuesta victoria, aunque en realidad no hubiera un cambio de política sustancial”.


