Entre la noche de este miércoles y la madrugada del jueves se espera que el ciclón tropical Erick toque tierra entre los estados de Oaxaca y Chiapas como huracán de categoría dos, aunque debido a las condiciones que presenta, como una rápida intensificación, no se descarta que eleve su fuerza a una categoría tres o superior,
lo que ha hecho que las autoridades federales activen los protocolos de emergencia ante desastres naturales.
Además de la advertencia por la fuerza de sus vientos y su rápido crecimiento, a pesar de que hasta anoche se mantenía como tormenta tropical, se alertó por las lluvias extraordinarias que duplicarán en sólo tres días el agua que cae en promedio durante un mes en esta zona.
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Fabián Vázquez Romaña, coordinador del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), expuso que, al sumar la lluvia pronosticada para este martes, miércoles y jueves, se prevé que casi la mitad de Chiapas, el sur de Oaxaca y Guerrero van a recibir más de 400 milímetros (mm) en sólo tres días, lo cual duplica el promedio de lo que llueve en un mes.
“Va a llover el doble de lo que llueve en un mes en el estado de Guerrero y de Oaxaca en tan sólo tres días. Entonces, eso nos da la magnitud del evento, sobre todo la distribución temporal, que sólo en tres días vamos a superar lo que llueve en un mes, tanto en Guerrero como en Oaxaca, principalmente en esas regiones del sur, y esto representaría casi es el doble de la lluvia que se presente; recordemos que falta todavía medio mes de junio”, dijo en conferencia de prensa.
Dada esta condición, confirmó que se esperan inundaciones inundaciones y deslaves, sobre todo en las zonas bajas, donde se llamó a que la población atienda las indicaciones en caso de llamar a desalojar.
Tras recordar que Erick será la primera tormenta de la temporada que tocará tierra, recalcó que sus efectos se extenderán desde días antes y después.
Acerca de su intensificación, explicó que el calor del océano, cuanto más se acerca a tierra, se convierte en la energía que lo fortalece y que es lo que advierte que podría crecer a una categoría mayor.
No obstante, mencionó que se podría debilitar una vez tocando tierra.
También adelantó que ya se han extendido las zonas de vigilancia a todos los polígonos en donde se advierte que los vientos de mayor fuerza podrían llegar hasta los 100 kilómetros por hora.
La directora del Centro Nacional de Comunicaciones de Protección Civil, Nadia Leticia Tadeo Benítez, informó que se implementan acciones antes, durante y después de la formación de ciclones tropicales, con el objetivo de proteger la vida de la población, sus bienes y su entorno, así como la infraestructura estratégica de las entidades federativas.
Ante esta situación, la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, giró instrucciones para intensificar la atención protocolaria, priorizando la actuación inmediata ante cualquier situación que represente un riesgo para la vida y el patrimonio de las familias guerrerenses.
Al encabezar la sesión permanente del Consejo Estatal de Protección Civil, donde coordinó acciones preventivas con presidentas y presidentes municipales de las regiones Costa Chica, Costa Grande, Acapulco y Montaña, la mandataria hizo un llamado a no difundir información falsa y evitar actividades que representen peligro, especialmente en zonas vulnerables, y ordenó la suspensión de clases en ambos turnos este miércoles para evitar riesgos.
El último pronóstico ubicó a Erick a 325 kilómetros (km) al suroeste de Boca de Pijijiapan, Chiapas, y a 370 de Puerto Ángel, Oaxaca, con vientos de hasta 85 km por hora.
Asimismo, se prevé oleaje de 2.5 a 3.5 metros de altura en costas de Oaxaca y Chiapas, y de 1.5 a 2.5 m de altura en el litoral de Guerrero.
Para atender de manera inmediata la situación, la Coordinación Nacional de Protección Civil informó que se ha instalado un puesto de mando en Huatulco, en donde participan la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), Secretaría de Marina (Semar) y Guardia Nacional (GN).
También, la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Comisión Nacional del Agua (Conagua), Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), y el gobierno de Oaxaca, para atender a la población bajo sus distintas facultades. En el caso de las Fuerzas Armadas, la Semar activó el Plan Marina, mientras que la Defensa echó a andar el Plan DN-III.
