Vaya forma de reaparecer del diputado Sergio Gutiérrez Luna, luego de haberse ausentado del Consejo Nacional de Morena. Y es que resulta que el legislador aprovechó su posición como presidente de la Cámara de Diputados para difundir una esquela por la muerte de Ozzy Osbourne. Es sabido que el veracruzano es fanático del género, pero eso es algo completamente personal. No se entiende, nos comentan, que la esquela —en la que expresa “su más sentido pésame” y recurre a lugares comunes— tuviera que difundirse por los canales oficiales de la Cámara. A muchos ese desplante les pareció, por decir lo menos, surrealista, aunque no faltó quien distinguiera en esta acción un ansia de ostentar que puede hacer y deshacer con los recursos de una institución de la República. Tampoco quien viera una acción que poco abona a dejar atrás las críticas que se han vertido hacia él y hacia su esposa por la denuncia que esta última presentó contra una ciudadana que la criticó y que ahora debe ofrecerle disculpas 30 días. En fin.