Algo para destacar en el cierre de la semana es que Fitch Ratings elevó la calificación de Pemex a largo plazo de B+ a BB, como consecuencia de las medidas que tomó el gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum para que la empresa pública pueda hacer frente a sus obligaciones a corto plazo. El anuncio de la agencia internacional se dio unos días después de que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público anunciara la emisión de bonos para apoyar a la paraestatal, como parte de una estrategia integral para fortalecer su situación financiera. Se espera que el próximo martes, la jefa del Ejecutivo federal encabece la presentación de un plan de reestructuración de la petrolera, algo en lo que está muy metida la secretaria de Energía, Luz Elena González. La elevación de su calificación crediticia por Fitch Ratings genera expectativas positivas y lleva a muchos a pensar que el nuevo esquema será determinante para el futuro de la empresa. Pendientes.