El que se cambió la camiseta tricolor por una fosfo fue el senador poblano Néstor Camarillo, quien anunció su incorporación a la bancada de Movimiento Ciudadano en el Senado. Tras 15 años en el PRI, dijo que, como el águila, necesitaba “renovar su plumaje” para volar más alto, ahora de color naranja. En MC lo recibieron con alegría. Pero en las filas tricolores ya le comenzaron a sacar sus trapitos al sol. Resulta que la secretaria general del PRI, Carolina Viggiano, reveló que el senador poblano tendrá que aclarar sus presuntos vínculos con el huachicol. La hidalguense dijo, en una entrevista radiofónica, que “es él quien tiene que dar una explicación y principalmente a sus electores… Sobre todo las verdaderas causas por las que se retira de nuestra bancada. Ayer me enteré que tiene carpetas por huachicol en Puebla”. Auch.

