Nos recomiendan estar muy atentos a los movimientos de los próximos días en el Senado, pues hay quienes aseguran que su expresidente, Gerardo Fernández Noroña, presiona para que le den algún cargo, ahora que los reflectores apuntan hacia otra parte. Algunos piensan que podría crearse algún centro de estudios históricos o de divulgación cultural para él. Es cosa de recordar que, en 2007, cuando había cierto equilibrio de fuerzas entre PRI, PAN y PRD, se acordó que los coordinadores de los dos primeros, Manlio Fabio Beltrones, y Gustavo Madero, respectivamente, se alternaran en la Presidencia de la Mesa Directiva un año y un año, y para darle un espacio al perredista Carlos Navarrete, se creó el Instituto Belisario Domínguez. Noroña siente que tiene derecho a seguir en la palestra, como las otras corcholatas del 2024, por lo que, en una de ésas, le inventan un cargo, aunque ello implique aumentar la burocracia parlamentaria. Pendientes.

