Kenia López, presidenta de la Cámara de Diputados

“Soy panista y seré una presidenta institucional”

La panista se compromete a privilegiar una “foto plural” de los tres poderes de la Unión y las bancadas en San Lázaro; tendré diálogo respetuoso con Sheinbaum, dice a La Razón

La panista Kenia López, al rendir protesta ayer como presidenta de la Cámara baja. Foto: Cuartoscuro

La diputada panista Kenia López Rabadán asumió este martes la presidencia de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, tras un acuerdo alcanzado por todas las fuerzas legislativas, aunque con un día de retraso respecto a lo previsto.

En entrevista con La Razón aseguró que su conducción privilegiará una “foto plural” de los tres poderes de la Unión y los distintos grupos parlamentarios que conforman San Lázaro trabajen de manera conjunta para que exista una representación de 500 diputados. Además, privilegiará una “mano legal” durante los debates.

  • El Dato: Los vicepresidentes de la Cámara de Diputados serán Sergio Gutiérrez Luna (Morena), Paulina Rubio Fernández (PAN) y Raúl Bolaños-Cacho Cué (PVEM).

“Para mí, hoy es una gran oportunidad de decirle a todo México: soy legisladora panista, de oposición, sí, pero, sobre todo, seré una presidenta institucional. Hay millones de mexicanos que querrán ver una foto plural”, expresó.

Lo anterior, luego de que la imagen de la instalación de la nueva integración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación , el pasado 1 de septiembre, estuvo marcada por la presencia de perfiles afines a la 4T.

Su papel, recalcó la panista, estará definido por la neutralidad hacia los seis grupos parlamentarios con representación en la Cámara y también con los demás poderes de la Unión: “Seré absolutamente respetuosa de la investidura que hoy tengo, respetuosa de mis compañeros y de la institución. Espero también que haya un respeto recíproco, porque este encargo exige altura de miras.

  • 435 votos a favor recibió la propuesta de la panista para presidir la Cámara baja

“Voy a representar a toda la Cámara. Hay tiempos para debatir y tiempos para dirigir, y este es un momento para dirigir. Somos 500 legisladores que representamos a las y los mexicanos, y estaré consciente de que me toca encabezar a la institución, no a una fracción”, dijo.

Su llegada ayer a la presidencia de la mesa directiva fue avalada en primera instancia por Morena para después pasar al pleno y lograr 435 votos en favor y sólo cuatro en contra. La votación la calificó como “extraordinaria”, pues representó más de dos terceras partes y agregó: “Reconozco la institucionalidad de mis compañeros. Es un logro de la política, del entendimiento”.

—En medio de debates tensos y presidencias salientes crispadas, ¿qué es lo que hará para mantener los ánimos apaciguados en el pleno?—, se le preguntó.

“Es necesario privilegiar el debate. Que cada legislador pueda subir a defender a su distrito, a su estado, a sus electores, y que todos tengamos la posibilidad de escucharlo. Para mí, el debate es el corazón del parlamento. No se trata de acallar voces, sino de permitir que el orador en turno tenga el derecho de ser escuchado”, respondió.

La panista refirió que no aplicará “mano dura”, sino “mano legal”, y señaló que estará basada en “la legalidad, respetuosa de la pluralidad y abierta a las discusiones. El protagonismo no debe ser de quien conduce la mesa, sino de quienes proponen, debaten y, en el mejor de los casos, dictaminan para beneficiar a los mexicanos”.

—En los últimos años los debates han caído en descalificaciones y han quedado estériles, ¿cómo lograr elevarlos?—, se le volvió a cuestionar.

“Creo que este es un buen momento para prestigiar la política. Este es el momento de hacerlo con honorabilidad y de hacerlo pensando en la nación. Estoy segura de que hay grandes oradores en la Cámara de Diputados, de distintas fuerzas. Lo que quiere la ciudadanía es que la política dé resultados”, aseguró.

Sobre el primer reto que enfrentará en la discusión del paquete económico 2026 —Ley de Ingresos, Presupuesto de Egresos y miscelánea fiscal—, dice: “¿Cuántos impuestos se cobrarán y cómo se invertirán? Ese será un debate trascendente, y estaré ahí dirigiéndolo de manera institucional. Mi obligación es que el debate sea franco, abierto, respetuoso y que se consigan los resultados que México necesita”.

Adelantó que habrá momentos de diálogo entre ella y la Presidenta Claudia Sheinbaum en los que, dijo, “seré absolutamente respetuosa. Para mí será importante representar a la Cámara de Diputados con dignidad. Las mujeres que hoy somos decisoras en este país sabemos la trascendencia de nuestro encargo, y espero que haya un respeto recíproco entre los poderes”.

La pluralidad política es ya un sello de esta legislatura, aseguró. “Me da mucho gusto que en el Senado, la presidenta sea una legisladora del partido en el Gobierno, y que en la Cámara de Diputados la presida una servidora, militante del PAN. Eso es una muestra clara y contundente de la pluralidad que hay en México”.