Luchas por mantener estructura de poder

Advierten desgaste de dinastías locales

Aspiración de Saúl Monreal a gobernar Zacatecas reaviva debate sobre dinastías políticas

Saúl Monreal reafirma su aspiración para ir por gubernatura de Zacatecas
Saúl Monreal reafirma su aspiración para ir por gubernatura de Zacatecas Foto: Especial


La intención del senador Saúl Monreal de convertirse en el tercer gobernador de su familia ha detonado un debate en Zacatecas sobre los límites del poder político heredado y el desgaste que enfrentan las llamadas dinastías locales.

Especialistas en ciencia política consultados por La Razón señalaron que, más allá de la confrontación pública, se trata de una lucha por mantener una estructura de poder que los Monreal han consolidado por décadas en la entidad.

El profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, Yair Mendoza, afirmó que la maniobra de Saúl Monreal no es menor: “Lo que está haciendo es levantar la mano, aunque diga que no. Con ese video busca dejar claro que él también tiene aspiraciones y evitar que otro grupo avance sin su presencia en la contienda interna”.

Según el académico, la apuesta del senador responde a la necesidad de preservar la influencia de su familia: “La verdad es que Monreal está cuidando sus propios intereses y los de la familia. Entendemos que es un gran linaje, con pleitos entre hermanos, pero no hay razón para dejar de lado una entidad que han gobernado por años”.

Mendoza subrayó que la familia Monreal es un grupo político con amplia capacidad de operación, y aseguró que “no es sencillo mantener el control de un estado por tres generaciones. Se requiere de una enorme habilidad política, entendida como la capacidad de negociar y pactar acuerdos que aseguren la continuidad. Eso han hecho los Monreal”, apuntó.

Por su parte, el politólogo Antulio Ontiveros recordó que las dinastías políticas no son nuevas en México. “Esto me remitió al caso de Manuel Ávila Camacho y su hermano Maximino. Las dinastías en el poder han existido y seguirán existiendo”, explicó.

El especialista dijo que la reciente reforma contra el nepotismo abrió un espacio legal que, aunque limita a familiares de gobernantes, no representa una prohibición absoluta. “No hay una restricción completa; se genera un tiempo de inhabilitación para parientes cercanos, pero no es una veda definitiva”, expuso.

En su análisis, Ontiveros resaltó que la aspiración de Saúl no puede entenderse solo en términos individuales, sino como expresión de intereses colectivos. “No estamos hablando únicamente de una persona. Él encabeza a un grupo que lo impulsa y que busca mantener presencia en el gobierno del estado”, explicó.

Sobre la viabilidad política de la candidatura, Ontiveros consideró que el contexto juega en contra: “Los Monreal han sido gobernadores dos veces y no han entregado resultados que garanticen continuidad. Zacatecas vive una crisis de inseguridad, una sequía prolongada y es uno de los principales exportadores de migrantes. Esas condiciones desgastan a cualquier apellido”.

Mendoza coincidió en que la disputa trasciende a la familia: “En Zacatecas hay un tiro interno por quién se queda con la entidad. Ahora que Saúl levantó la mano, hay una rivalidad de intereses dentro del partido que buscará convencer al mayor número de voluntades”.

Para Ontiveros, lo que ocurre en Zacatecas es reflejo de un fenómeno mayor: “El sistema político mexicano está cambiando, pero sigue permitiendo que estas dinastías se reproduzcan. No estamos frente a una ruptura en Morena, sino a un reacomodo de fuerzas que veremos también en otros estados”.