Y fue Ariadna Montiel quien ayer compareció en el Senado con un indicador que no hay forma de que sea controvertido —la medición de la pobreza se hace con los mismos parámetros desde hace sexenios— y por lo tanto se ha vuelto estandarte de la 4T. La secretaria de Bienestar, nos comentan, destacó que 13.5 millones de personas salieron de la pobreza. “La desigualdad se redujo significativamente: de 2018 a 2024, el ingreso de los hogares más pobres aumentó 35 por ciento, mientras que el de los más ricos creció un 4 por ciento. Actualmente, 32 millones de personas reciben un programa de Bienestar”, sostuvo ante legisladores que insisten en cuestionar la efectividad de las transferencias directas. La histórica reducción de la pobreza, les dijo, es fruto de una fórmula exitosa: la política de bienestar, que combina el sistema de protección social, la mejora salarial histórica y la inversión pública que genera empleos dignos. Qué tal.

