No hay una cifra exacta y pública reciente del número total de custodios en México, pero “sí sabemos que hay un déficit significativo; en 2024 se reportaba un custodio por cada ocho internos en prisiones estatales, lejos de las recomendaciones internacionales”, dijo en entrevista el investigador Andrés M. Estrada.
El especialista en seguridad dijo que en el país la sobrepoblación penitenciaria aún es un problema, con más de 250 mil personas privadas de la libertad en 2025 lo que “indica una necesidad alta de personal de custodia para cubrir los más de 300 centros penitenciarios”.
- El Tip: Manuel Martínez, subsecretario de Control Penitenciario del Edomex, informó el 28 de marzo que han destituido a 20 custodios de penales por posibles actos delictivos.
Andrés Estrada, quien reunió testimonios de los guardias de seguridad en su libro La verdad de los custodios, comentó que su realidad es “tristísima” debido a que enfrentan jornadas de más de 24 o 36 horas, sueldos insuficientes, amenazas y desgaste emocional. En ese contexto, los custodios no sólo lidian con el riesgo interno, sino la violencia que los persigue fuera del trabajo.
Agregó que tuvo la oportunidad de estar de cerca de varios custodios —uno de ellos con más de 40 años de servicio—, le dijo que al interior de un penal todo se resume en conflicto: “Hay nuevos elementos que se dejan amedrentar… entonces uno tiene que ponerse al tú por tú”.
Asimismo, afirma que los vigilantes se debaten entre cumplir la ley o adaptarse a la lógica del crimen. Algunos ceden por miedo o necesidad, los que resisten y son relegados o acosados. La corrupción “es el eje que sostiene al sistema penitenciario”.
Y dice que hay casos en los que custodios, directivos y personal administrativo participan en la introducción de objetos ilegales “desde teléfonos hasta mercancías”, mientras que los internos mantienen el control de los penales.
El investigador advirtió que es urgente la preparación de los custodios, porque son los que se comunican con los reos y, señaló que únicamente Querétaro y Yucatán tienen a un intérprete o traductor que está a disposición de cualquiera de los tres mil 109 y mil 827 reos, respectivamente.


