Complica rescate de mineros subida abrupta de agua en el Pinabete

En forma “abrupta”, la madrugada de este domingo los niveles del agua dentro de la mina “El Pinabete”, donde 10 trabajadores cumplieron ayer 11 días atrapados, se elevaron, lo que exacerbó la desesperación y molestia entre los familiares, que cuestionaron la efectividad de los cuerpos de rescate que laboran en el lugar y la actuación de las autoridades.

Durante la mañana, el Gobierno de Coahuila dio a conocer que este incremento súbito provocó que el líquido llegara a 12.92 metros en el pozo dos; a 15.51 metros en el tres, mientras que en el pozo número cuatro alcanzó los 12.56 metros, hasta el corte de las 8:00 horas.

La coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, aseguró a los familiares que “no los vamos a abandonar, ni a ellos ni a los mineros atrapados. Compartimos la angustia que ellos sufren, y sepan que no estamos escatimando ningún recurso para lograr el propósito”.

A diferencia de los reportes emitidos por el gobierno local, la funcionaria indicó que el agua en los pozos dos, tres y cuatro alcanzó un nivel de 10.4 metros.

Argumentó que la zona se enfrenta a condiciones “extraordinarias”, debido a que colinda al sur con la mina Conchas Norte, la cual es 10 veces más grande que “El Pinabete” y que además se encuentra abandonada desde hace 30 años aproximadamente, periodo durante el cual acumuló “un volumen muy alto (de agua) y que será determinado cuando tenga mayor información”, mencionó.

Por la noche, el gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme, dio a conocer que la inundación seguía en ascenso y ayer ya alcanzaba 20 metros, por lo que se preveía modificar la estrategia para taponar las posibles filtraciones de agua, presuntamente provenientes de Conchas Norte.

Laura Velázquez agregó que un grupo de especialistas del Servicio Geológico Mexicano de la Secretaría de Economía y de la empresa Mimosa ya diseñan una estrategia para evitar que el incremento siga y así generar condiciones para el rescate.

La funcionaria subrayó que Protección Civil en México es uno de los más experimentados del mundo, debido a que el territorio mexicano es uno de los más vulnerables a los fenómenos naturales, razón por la cual pidió “tener confianza de que poseemos los conocimientos necesarios”.

A pesar de las aseveraciones de las autoridades, las familias expresaron su desconfianza por los resultados observados. Por la tarde, ofrecieron una conferencia de prensa en la que reclamaron que las autoridades no han permitido la participación ni han atendido las recomendaciones de trabajadores que conocen la zona y que, dicen, podría acelerar el rescate.

“Hay que trabajar en conjunto, porque vamos en una misma finalidad. Aquí son seres humanos. Quizás ellos no sienten lo mismo; es como un trabajo, porque no son sus familiares. Para ellos es muy fácil decir: ‘los niveles del agua subieron’. ¿Y nosotros qué? Nosotros nos quedamos con la desesperación, la incertidumbre, la tristeza, el dolor que estamos viviendo”, dijo la hermana de uno de los mineros.

Acusaron que se ha perdido tiempo e, incluso, una de las mujeres aseguró que las bombas encargadas de extraer el líquido se han detenido por hasta cinco horas.

“En caso de que mi hermano y sus compañeros no salgan con vida, esto es un crimen, porque trabajan bajo circunstancias muy malas. Son los que generan el carbón, andan en las entrañas de la tierra para nosotros tener luz. ¿Pagándoles cuánto? A 200 pesos la tonelada”, dijo.

Denuncian dilación en salvamento

Expertos en Protección Civil y partidos de oposición denunciaron dilación en la llegada de equipos de análisis de la situación para verificar el escenario en la mina de Sabinas, Coahuila, lo que complicó el escenario de rescate de los 10 mineros que permanecen atrapados.

“En cualquier rescate debe haber un análisis previo para no exponer a nadie, pues no se trata de poner en peligro a unas personas para sacar a otras; por ello, llegó un poco retrasado el equipo de análisis de la situación, pues al haber este tipo de retrasos, pudo complicar todo el escenario, destacó el exdirector de Protección Civil de la Ciudad de México Fausto Lugo.

En entrevista con La Razón, aseguró que las horas son clave para rescatar a las personas, pues entre menos tiempo se tarden, son mayores las esperanzas de vida, dijo.

Ana María Balderas Trejo, presidenta de la Comisión de Protección Civil y Prevención de Desastres de la Cámara de Diputados, mencionó que lo primordial en este momento es rescatar con vida a todos los mineros y ya después comenzar a revisar condiciones y responsables de los permisos y la falta de seguridad.

“Se debió prevenir y evitar este tipo de incidentes, cuando ya había mensajes de alertamiento de las autoridades de esa zona. Además, la Secretaría del Trabajo es la que nos debe explicar sobre los permisos concedidos. Lo que nos dicen es que hay sólo dos supervisores para todo Coahuila y eso no puede ser”, señaló.

La legisladora del PAN sostuvo que otro problema es que la información está cerrada por parte de las autoridades, lo que genera mayor expectativa y preocupación sobre lo que puede estar pasando.

Al opinar sobre este tema, el dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano, aseguró que en el rescate de los mineros se conjunta la tardanza de las autoridades y el terreno, pues es preocupante que no hayan desplegado mayores capacidades y recursos para la extracción de agua.

“Pareciera que están sólo ahí con una capacidad mediana para hacer los trabajos de auxilio y eso es, desde luego, muy preocupante”, agregó.

Además, comentó que no hay que olvidar que pareciera ser que las tragedias como ésta son las que se hablan y revelan la verdadera situación infrahumana en que trabajan los mineros.