Aumenta cruce de ilegales en Pacífico

Foto: larazondemexico

AP San Diego

Luego que el ejército de Estados Unidos reforzara las zonas fronterizas, los indocumentados han optado por explotar la ruta marítima como vía de acceso, señaló el agente Tim Feige. La ruta abarca mil kilómetros cuadrados de océano, que abarca desde Tijuana hasta Los Ángeles.

Los coyotes usan viejas embarcaciones de madera, de un solo motor, conocidas como “pangas”, no muy anchas y de unos ocho metros de largo. Si se encuentran en aguas territoriales estadounidenses, casi infaliblemente están contrabandeando personas o drogas.

Las autoridades estadounidenses incrementaron la cantidad de patrullas marinas cerca de la frontera, por lo que las pangas deben alejarse más de la costa y dejar su carga más al norte.

En mayo se encontró una panga con 24 personas a bordo unos 70 kilómetros (43 millas) mar adentro, frente a San Diego. Y en noviembre se halló una embarcación abandonada a la altura de Laguna Beach, 137 kilómetros (85 millas) al norte de México.

Desde noviembre arribaron seis embarcaciones a las inmediaciones de la base de la Armada de Camp Pendleton, 80 kilómetros (50 millas) al norte de la frontera. Dos fueron abandonadas. La base se encuentra a corta distancia de la carretera interestatal 5 y el personal de la base incrementó la vigilancia de la zona.

Las autoridades creen que los coyotes marinos dejan a los indocumentados en tierra y se regresan a México para no perder sus botes ni dejar evidencias. Pero si presienten que pueden ser pillados, abandonan de inmediato las embarcaciones.

La llegada de indocumentados por vía marítima no es nueva, pero las autoridades dicen que esa actividad cobró una nueva dimensión a partir del 2007, cuando comenzaron a aparecer pangas que viajaban de noche, sin luces, con hasta 25 personas a bordo, que llegan a pagar 5 mil dólares por cabeza, el doble de lo que se paga por un cruce por tierra. En una buena noche, uno de esos viajes puede generarle 100 mil dólares a los coyotes, o al menos a quienes los emplean.

Las autoridades detuvieron a 753 presuntos indocumentados que trataban de ingresar al país en las costas del sur de California y en el mar entre octubre y agosto, comparado con los 400 del año pasado.