Kim arrecia pelea con EU, pero saca bandera blanca a Surcorea

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Foto: larazondemexico

El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, lanzó ayer sus resoluciones de Año Nuevo: por un lado, mantener el conflicto con Estados Unidos a través de una retórica desafiante y, por el otro, tratar de hacer la paces con su vecino de Corea del Sur. “Todo Estados Unidos está al alcance de nuestras armas nucleares y hay un botón nuclear siempre en mi escritorio. Ésta es la realidad, no una amenaza”, manifestó ayer Kim durante su discurso televisado por el festejo de Año Nuevo.

En este sentido, afirmó que utilizará armas nucleares sólo cuando su seguridad esté amenazada. “Este año nos vamos a centrar en la producción masiva de cabezas nucleares y misiles balísticos para un despliegue operacional. Estas armas sólo serán utilizadas si nuestra seguridad se ve amenazada”, especificó.

Al mismo tiempo, el gobernante norcoreano insinúo por primera vez que su país podría participar en los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán en febrero en la ciudad surcoreana de Pyeongchang. “Espero sinceramente que los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang se lleven a cabo con éxito. Estamos dispuestos a tomar las medidas necesarias, incluido el envío de nuestra delegación” a esos juegos, aseguró.

El Dato: Corea del Sur acogerá los Juegos de Invierno del 9 al 25 de febrero y los Juegos Paralímpicos desde el 9 de marzo.

El anuncio fue recibido con satisfacción por la presidencia surcoreana. “Si los juegos son un éxito, esto contribuirá a la paz, no sólo en la península coreana sino también en la región y en el mundo”, manifestó el gobierno de Seúl en un comunicado. Esta opinión fue compartida por el presidente del comité organizador (POCOG), Lee Hee-Beom. “Nos congratulamos activamente de la sugerencia del Norte de que está listo para iniciar negociaciones para participar en los juegos”, aseguró el funcionario a AFP.

Este acontecimiento será “una buena ocasión para mostrarle al mundo la afabilidad del pueblo coreano”, manifestó el líder norcoreano. “El año 2018 será un año significativo tanto para el Norte como para el Sur, ya que el Norte celebrará el 70 aniversario de su nacimiento y el Sur albergará los Juegos Olímpicos de Invierno”, agregó.

El dirigente norcoreano advirtió, no obstante, que las tensiones en la península coreana podrían amenazar los juegos. “Las fuertes tensiones militares entre el Norte y el Sur deben reducirse y debe prevalecer una atmósfera pacífica. Mientras estemos en una situación inestable que no es ni la guerra ni la paz, el Norte y el Sur no pueden garantizar el éxito de sus acontecimientos programados, incluidos los Juegos Olímpicos, sentarse a hablar o avanzar hacia la reunificación”, declaró.

“Debemos mejorar las relaciones entre el Norte y el Sur, que están congeladas, y convertir este año en un periodo crucial en la historia nacional”, añadió.

Tanto el gobierno surcoreano como los organizadores desean que Corea del Norte esté en la competición, pero la participación de los norcoreanos en acontecimientos deportivos depende en gran medida de la evolución de la situación política y militar en la península.

El presidente surcoreano, Moon Jae-in, expresó en diciembre su esperanza de que los Juegos Olímpicos de Invierno contribuyan a rebajar la tensión. Para ayudar a apaciguar la situación propuso un aplazamiento de las maniobras militares que sus tropas realizan cada año con las de Estados Unidos, su principal aliado.

ONU lanza alerta roja ante peligros del mundo

El secretario general de la ONU, António Guterres, lanzó el domingo  “una señal de alerta: una alerta roja” a la comunidad internacional ante la agudización de los conflictos y el surgimiento “de nuevos peligros”.

Guterres hizo el llamado en un video difundido por la ONU al cumplir este 1 de enero el primer año de mandato al frente de Naciones Unidas, puesto en el que relevó al surcoreano Ban Ki-moon.

En su mensaje, el exprimer ministro portugués describió una serie de desafíos que enfrenta la comunidad mundial, y citó entre ellos la “ansiedad” en torno a las armas nucleares que, dijo, “está en el nivel más alto desde la Guerra Fría”.

También lamentó que el cambio climático esté avanzando más rápido que las respuestas mundiales, el aumento de las desigualdades y las “horribles violaciones de los derechos humanos”.

“El nacionalismo y la xenofobia van en aumento. Si sumamos todo, nos encontramos con la paradoja de nuestro tiempo: los desafíos son cada vez más globales”, agregó el titular de la ONU.

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