La capilla ardiente del Papa Francisco en la basílica de San Pedro concluyó ayer, después de tres días abierta para que los fieles se despidiesen del pontífice, en lo que se calcula que 250 mil personas acudieron a rendirle homenaje: el cierre del féretro se realizó en una ceremonia privada y no televisada, antes del funeral y el entierro de este día.
Según se ha podido ver en las imágenes distribuidas del interior de la basílica, poco antes de las 19:00 hora local, los fieles dejaron de desfilar ante el ataúd de Francisco y se quedaron únicamente religiosos y personal del Vaticano.
Los trabajadores comenzaron entonces a retirar las sillas dispuestas junto al féretro, reservadas para los colaboradores cercanos del Papa argentino y diversas autoridades, así como las vallas que delimitaban la nave central, por donde durante tres días miles de personas hicieron fila para dar su último adiós.
Trump dice que no necesita permiso para bombardeos en Venezuela
Se ha estimado la participación de unos 200 mil dolientes en la Plaza de San Pedro y hasta 300 mil a lo largo de la ruta de cuatro kilómetros desde el Vaticano hasta el lugar de entierro: la basílica de Santa María la Mayor. Ante ello, se realizó el despliegue de más de dos mil 500 policías y mil 500 soldados, además de un buque naval armado frente a la costa, así como escuadrones de aviones de combate.
Líderes mundiales, entre ellos el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el de Argentina, Javier Milei, junto con miembros de la realeza, acudieron a Roma para el funeral. El Vaticano dijo que se ha confirmado la presencia de 164 delegaciones, incluyendo 54 jefes de Estado y 12 soberanos reinantes.
Entre los asistentes están los presidentes francés, Emmanuel Macron; brasileño, Luis Inacio Lula da Silva; alemán, Frank Steinmeier; los reyes de España, Bélgica, Luxemburgo y Mónaco. Aunque se habló de la asistencia del ucraniano Volodimir Zelenski, no se confirmó su presencia.
El último viaje del Papa Francisco empezó con una misa funeral en varias lenguas en la plaza vaticana de San Pedro, antes de su entierro en la basílica de Santa María la Mayor, en el centro de Roma. A las 05:30, hora local (22:30 hora de México), se abrió la plaza y a las 08:00 (03:00 en México) inició la mesa funeral, presidida por el italiano Giovanni Battista Re, decano del Colegio Cardenalicio.
Durante la noche, el cabildo de San Pedro asegurará una presencia de oración y vigilia en el cuerpo del Pontífice, hasta los preparativos para la Santa Misa de mañana (sábado) por la mañanaVaticano, Comunicado de prensa
La ceremonia duró alrededor de hora y media y, en ella, participaron 224 cardenales y 750 obispos y sacerdotes. El lado derecho de la plaza fue ocupado por las delegaciones de Jefes de Estado. También tuvieron su lugar como invitados especiales los pobres, a quienes Francisco no olvidó invitándoles al circo, al cine o dándoles dignidad instalando duchas o ambulatorios para atenderles en la plaza de San Pedro.
En las primeras filas, los migrantes, de quienes Francisco siempre se preocupó y pidió su acogida, estaban presentes algunos de los que la ONG Mediterránea salvó en ese mar, como los refugiados que llegaron con el avión papal desde la isla griega de Lesbos.
Hacia las 09:30 (04:30 de México) el féretro partió hacia la basílica de Santa María la Mayor y fue visible para el público agolpado tras barreras metálicas a lo largo del recorrido. Pantallas gigantes transmitieron su avance.
Hacia las 10:00 (05:00 de México), en consonancia con la labor de Francisco con los marginados, un grupo de personas pobres y necesitadas recibiría el féretro para rendirle homenaje.
El cardenal camarlengo Kevin Farrell presidió la inhumación, en privado.
Su tumba se estuvo preparando detrás de unos paneles de madera en el interior del templo que él mismo eligió para estar cerca de una imagen de la Virgen que veneraba y ante la que rezaba a menudo.
Las fotos publicadas por el Vaticano el viernes muestran la lápida de mármol apoyada contra el pavimento, con el simple grabado en latín que pidió en su último testamento: Franciscus.
Los cardenales visitarán la basílica de Santa María la Mayor el domingo. Entrando por la Puerta Santa, visitarán el icono de la Salus Populi Romani, que era querido por Francisco, y celebrarán las oraciones vespertinas, dijo el Vaticano.
Los cardenales han ido llegando a Roma, y 149 de ellos se reunieron el viernes por la mañana para discutir asuntos de la Iglesia. El trabajo del cónclave para elegir al nuevo Papa no comenzará hasta al menos el 5 de mayo, después de los nueve días de luto oficial.
No volverán a reunirse hasta la próxima semana, lo que significa que es poco probable que se fije una fecha para el cónclave hasta después del funeral.
