Al menos 72 palestinos, incluidos niños y mujeres, fueron asesinados por disparos y ataques aéreos israelíes durante las primeras horas de ayer mientras esperaban ayuda alimentaria o permanecían refugiados en campamentos. Según el Ministerio de Salud de Gaza, 29 de ellos murieron cuando intentaban recibir harina y provisiones básicas, en medio de una desesperación creciente por hambre, enfermedad y desplazamiento forzado.
Uno de los ataques más letales ocurrió sobre la calle Saladino, cerca del corredor de Netzarim, donde más de 100 personas resultaron heridas cuando fuerzas israelíes abrieron fuego contra una multitud de civiles. A lo largo del día, otros bombardeos impactaron viviendas y campamentos en Zeitoun, al-Mawasi, Khan Younis y Maghazi, que dejaron un saldo de muertos que incluye familias enteras. En Maghazi, una pareja y sus hijos fallecieron juntos al ser alcanzados por una explosión.
Hamas denunció que los asesinatos perpetrados por Israel contra palestinos hambrientos constituyen crímenes de guerra, mientras que organizaciones como la ONU y la Media Luna Roja acusaron al gobierno israelí de obstaculizar el acceso al combustible necesario para mantener operativos los hospitales. La Fundación Humanitaria de Gaza, un grupo respaldado por Israel y EU, distribuye ayuda de forma limitada en áreas controladas por tropas israelíes, e ignoran a organizaciones con décadas de experiencia en crisis humanitarias.
- 55,600 Personas han muerto en Gaza desde octubre de 2023
El ejército israelí ha declarado que algunos civiles que se aproximaron a zonas “en combate activo” representaban una amenaza para sus fuerzas, aunque no ha presentado pruebas al respecto. Sin embargo, múltiples testimonios y reportes de campo de Al Jazeera señalan que los disparos se realizaron incluso contra personas desarmadas, algunas de las cuales fueron abatidas por francotiradores o drones mientras recogían bolsas de harina.
Ahmed Ghaben relató que su sobrino fue asesinado al intentar conseguir alimento para su familia. “Fue a buscar un saco de harina. No era combatiente. Lo mataron por intentar sobrevivir”, dijo. Esta escena de horror se ha repetido desde que Israel levantó parcialmente el bloqueo en mayo, que permite sólo la entrada de ayuda restringida por el FGH.
También la situación hospitalaria es crítica: los pocos centros médicos operativos tienen combustible suficiente para sólo tres días. Las autoridades sanitarias locales señalan que el ejército israelí impide el acceso a los depósitos de combustible con el argumento de que se ubican en “zonas rojas”. Mientras tanto, más de 55,600 personas han muerto en Gaza desde octubre de 2023, y casi 130 mil han resultado heridas.
El Programa Mundial de Alimentos advirtió que el volumen de comida entregado en las últimas semanas apenas cubre una mínima parte de las necesidades. “Cualquier violencia que tenga como resultado que personas hambrientas mueran o resulten heridas mientras buscan ayuda es completamente inaceptable”, expresó el organismo.
Por otro lado, el conflicto entre Israel e Irán desvía la atención mediática y diplomática del desastre humanitario en Gaza. “La guerra entre Irán e Israel domina las noticias. Pero aquí, las masacres continúan día y noche”, lamentó Adel, residente de la ciudad de Gaza. “Nos están olvidando”.


