El incendio que consumió gran parte del complejo residencial Wang Fuk Court, en el distrito de Tai Po, dejó 44 personas muertas, 62 resultaron heridas de las cuales 45 se encuentran en estado crítico y casi 300 desaparecidas, de acuerdo con las autoridades de Hong Kong tras un operativo que se extendió durante toda la noche de ayer. El siniestro, que se originó en los andamios de bambú instalados para trabajos de renovación, avanzó con una velocidad inusual entre siete de las ocho torres del conjunto habitacional, construido en la década de 1980 y habitado por alrededor de 4 mil 800 personas.
La magnitud del fuego, uno de los peores registrados en la ciudad en años, abrió un debate sobre la seguridad en las remodelaciones urbanas y sobre la capacidad de respuesta oficial en un momento crítico para el territorio.
- El Dato: la madrugada del jueves las autoridades informaron haber controlado 4 manzanas. Las operaciones continuaban en 3 más después de más de 15 horas.
Los bomberos confirmaron que las llamas se iniciaron en el exterior del edificio debido al material inflamable adherido a los andamios. Desde allí, el fuego penetró en los departamentos, rompiendo ventanas y derritiendo paneles plásticos. En cuestión de minutos, el humo invadió los pasillos, y varios pisos se volvieron intransitables. Los primeros reportes indicaron que algunos residentes quedaron atrapados detrás de puertas bloqueadas por estructuras caídas, mientras otros fueron sorprendidos mientras dormían. El fuego alcanzó temperaturas extremadamente altas, lo que dificultó las maniobras de rescate y obligó a los oficiales a replantear el acceso a las zonas superiores.

Reportan tiroteo en Universidad de Brown, Rhode Island; emiten alerta por tirador activo
A lo largo de la madrugada de este jueves, decenas de familias permanecieron en la zona, desesperadas por conocer el paradero de sus seres queridos. Los centros comunitarios convertidos en refugios improvisados se saturaron rápidamente. Los testimonios describieron escenas de angustia: personas cubiertas de ceniza, vecinos buscando listas de evacuados y voluntarios distribuyendo agua entre el caos. Un hombre identificado como Wong, de 71 años, relató con dificultad que su esposa quedó atrapada en un piso alto: “No he recibido ninguna actualización. Cada minuto que pasa siento que se me va la esperanza”.
Otros residentes narraron saltos entre pisos y huida por escaleras oscuras llenas de humo. Las autoridades desplegaron cerca de 800 bomberos, más de un centenar de ambulancias y vehículos especializados para contener un incendio que se extendió por todo el costado oriental de las torres.
- 279 Habitantes desaparecidos por el incendio
Por su parte, el subdirector de operaciones del Servicio de Bomberos, Derek Armstrong Chan, explicó que las temperaturas dentro de los edificios “eran tan elevadas que el avance se volvió casi imposible”, un escenario que prolongó las labores más allá de lo previsto. Su declaración, “La temperatura dentro de los edificios afectados es muy alta. Nos resulta difícil entrar al edificio y subir las escaleras”, evidenció las limitaciones técnicas ante un siniestro de esta dimensión.
Los equipos utilizaron escaleras telescópicas y chorros a presión para reducir las llamas desde varios ángulos, mientras drones térmicos marcaban zonas donde aún podía haber sobrevivientes. Hacia la mañana de este jueves, parte de la estructura ardía de manera interna, lo que mantuvo el ingreso restringido en áreas inestables. Los rescatistas lograron evacuar a alrededor de 900 personas vivas, muchas de ellas con quemaduras, intoxicación por humo o lesiones provocadas por desprendimientos de material.
- 4800 Personas habitan el complejo residencial
Asimismo, los inspectores encontraron láminas de espuma calórica adheridas en secciones exteriores, un material altamente inflamable que se ha vuelto común en renovaciones rápidas de fachadas. El director del Servicio de Bomberos, Andy Yeung, confirmó que este hallazgo forma parte central de la investigación. Las imágenes transmitidas por medios locales mostraron explosiones esporádicas en varios pisos, ocasionadas por la combustión de estos materiales.
El complejo Wang Fuk Court, compuesto por ocho torres de 31 y 32 plantas, se había sometido recientemente a trabajos de remodelación, lo que explica la instalación de mallas y andamios. Expertos en seguridad urbana consultados por organizaciones locales insistieron en que la combinación de bambú, plástico y espuma térmica representa un riesgo acumulado que se agudiza en zonas de alta densidad poblacional como Tai Po.
- El Tip. La malla de construcción ecológica y los andamios de bambú utilizados en los edificios son un pilar de la arquitectura tradicional china y deberán ser cambiados.
POLÍTICA Y DETENIDOS. El incendio ocurrió a tan sólo unos días de las elecciones legislativas previstas para el 7 de diciembre, lo que añadió tensión política adicional a la tragedia. El jefe del Ejecutivo, John Lee, expresó su consternación por la magnitud de la emergencia y señaló que algunas actividades oficiales relacionadas con la preparación electoral serían suspendidas de manera provisional, sin aclarar si la fecha de los comicios podría verse afectada. Lee indicó que la prioridad del gobierno es “extinguir el incendio, rescatar a los residentes atrapados y brindar apoyo médico y emocional a las víctimas”. Después, iniciará una investigación “exhaustiva y transparente”.
Por su parte, el presidente chino, Xi Jinping, envió sus condolencias a los afectados y a las familias de las víctimas, entre las que se encuentra un bombero de 37 años que murió en la operación. Xi pidió a las autoridades locales “adoptar medidas que reduzcan cualquier pérdida adicional” y fortalecer los estándares de seguridad en obras de gran escala. Su pronunciamiento coincidió con la creciente indignación de algunos residentes, quienes acusaron a la administración local de permitir renovaciones sin l precauciones.
Mientras que la policía confirmó el arresto de tres hombres, de entre 52 y 68 años, bajo sospecha de homicidio por presuntas responsabilidades relacionadas con la instalación y supervisión de los trabajos de renovación. Los agentes investigan si hubo negligencia en la manipulación de materiales inflamables o fallos en la certificación de seguridad que permitirían imputaciones más amplias.
El análisis preliminar sugiere que la antigüedad de las torres pudo haber contribuido a la rápida propagación del fuego. Su diseño original no contemplaba ciertos estándares modernos de contención de incendios.

