Trump, vergüenza ante el mundo,
afirma Joe Biden

Cuando faltan apenas 12 días para el final de su mandato, y en medio de las voces que piden su destitución o juicio político, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el viernes que no asistirá a la juramentación del presidente electo, Joe Biden, el próximo 20 de enero, lo cual fue celebrado por el presidente electo.

Unas horas antes de que Twitter anunciara la suspensión permanente de su cuenta “debido al riesgo de una mayor incitación a la violencia”, el mandatario escribió: “a todos los que han preguntado, no asistiré a la juramentación el 20 de enero”.

Fue una decisión prevista, ya que Trump declaró falsamente que ganó la elección del 3 de noviembre y proclamó denuncias infundadas de fraude electoral. Lo anterior, a pesar de su mensaje de la víspera de que se esforzaría por garantizar una “transición del poder tranquila, en orden y armoniosa” a su sucesor.

Será el primer presidente desde Andrew Johnson (1865-1869) que no asistirá a la juramentación de su sucesor, a excepción de Richard Nixon, quien ya había renunciado. Tradicionalmente, los presidentes entrante y saliente van juntos al Capitolio para la ceremonia como símbolo de una transición pacífica.

Trump no dio indicios acerca de qué hará durante sus últimas horas en el cargo. Sin embargo, elogió a sus seguidores y dijo en otro tuit que “a los 75 millones de grandes patriotas estadounidenses que votaron por mí, AMERICA FIRST y HACEN A AMERICA GRANDE OTRA VEZ, tendrán una VOZ GIGANTE en el futuro. ¡No serán irrespetados ni tratados injustamente de ninguna manera, formal o informal!”.

En respuesta, el presidente electo celebró que el mandatario saliente no asista a su investidura: “me dijeron que él había dicho que no iba a presentarse en la juramentación. Una de las pocas cosas en las que él y yo hemos acordado. Es bueno que no se presente”.

En conferencia de prensa, Biden añadió que Trump “ha superado incluso mis peores nociones sobre él. Ha sido una vergüenza para el país, nos ha avergonzado en todo el mundo”. Sobre la posibilidad de que el vicepresidente Mike Pence acuda, dijo: “él es bienvenido”.

Biden también evitó pronunciarse sobre la iniciativa demócrata para iniciar un nuevo juicio político a Trump por su rol en la irrupción en el Capitolio, ya que eso “lo debe decidir el Congreso”. Desde su búnker de transición en el Delaware, dijo estar “más enfocado” en trabajar en sus planes para controlar la pandemia de Covid-19 y aprobar paquetes de estímulo para mitigar su impacto económico.

SIGUE TENSIÓN

En tanto, uno de los voceros de la Casa Blanca, Judd Deere, rechazó en un comunicado el posible juicio político contra Trump por su rol en los disturbios en el Capitolio. Citando al mandatario, dijo que este “es un momento de sanación y unidad”, y calificó al eventual proceso, que los demócratas anticiparon llevarán a cabo, como “políticamente motivado. Sólo serviría para continuar dividiendo a nuestro gran país”.

Distintos medios han reportado que Pence se ha opuesto a invocar la Vigesimoquinta Enmienda, por lo que la eventual remoción de Trump debería ser ejecutada por el Congreso.

En tanto, el Departamento de Justicia anunció que procesó a 15 personas involucradas en el asalto al Capitolio, incluido un hombre que tenía 11 cócteles Molotov en su camioneta y otro que invadió la oficina de Pelosi. También se ha acusado a legislador estatal de Virginia Occidental Derrick Evans, por su papel en el asalto al Legislativo, aunque fue liberado bajo fianza unas horas después.

La polémica sobre el asalto al Capitolio ha provocado ya dos dimisiones en el gabinete de Trump y otros altos mandos, pero según los medios estadounidenses, la única razón por la que no ha habido más renuncias es la decisión de altos funcionarios de tratar de mantener la estabilidad durante la transición.