Abusos del clero en Polonia

Vaticano: Papa acepta renuncia de obispo acusado de encubrir abusos sexuales

Una película documental expuso dos casos de sacerdotes pederastas que el obispo polaco Edward Janiak manejó; se pudo fundamentar acusaciones hechas en el filme

Edward Janiak es señalado de encubrir casos de abuso sexual por parte de sus sacerdotes
Edward Janiak es señalado de encubrir casos de abuso sexual por parte de sus sacerdotesFoto: Especial
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El papa Francisco aceptó la renuncia de un obispo polaco que fue expulsado de su diócesis hace unos meses a la espera de una investigación del Vaticano tras ser señalado de encubrir casos de abuso sexual por parte de sus sacerdotes.

La renuncia de Edward Janiak como obispo de Kalisz indicó que el Vaticano pudo fundamentar algunos elementos de las acusaciones hechas en un documental sobre abuso sexual en Polonia que ha socavado la influyente jerarquía católica del país.

Janiak, de 68 años, está por debajo de la edad normal de jubilación de los obispos, que es de 75 años. Tras la renuncia, Francisco nombró administrador temporal de la diócesis al arzobispo de Lodz, Grzegorz Rys.

En junio, a la espera de la investigación, Francisco le ordenó a Janiak que se fuera de Kalisz y le prohibió tener alguna influencia sobre cómo se maneja la diócesis.

En mayo, el documental en línea “Playing Hide and Seek” (Jugando a las escondidas) expuso dos casos de sacerdotes pederastas que Janiak manejó, primero como obispo auxiliar de Wroclaw y luego como obispo de Kalisz, una diócesis que encabezaba desde 2012.

El filme presenta un testimonio judicial sobre el papel de Janiak quien ayudó a transferir a un sacerdote, posteriormente condenado y expulsado, de Wroclaw a otra diócesis, incluso después de que había comenzado una investigación penal. La película también documentó un supuesto encubrimiento relacionado con otro sacerdote durante el tiempo de Janiak como obispo de Kalisz.

Esta es la segunda película realizada por los hermanos Tomasz y Marek Sekielski sobre el abuso del clero polaco. Su primera película, estrenada el año pasado, “Tell No One” (No se lo digas a nadie), provocó un ajuste de cuentas nacional en un país donde no hay una autoridad moral más alta que la Iglesia católica y su clero.

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