Una mezcla de tecnología y modernidad caracterizan al Quetzalcóatl, el primer Boeing 787-9 Dreamliner que Aeroméxico recibió, de un pedido de 10 aviones, y permitirá renovar la flota de la aerolínea en los siguientes meses e incrementar en 20 por ciento sus rutas de vuelos internacionales.
El Quetzalcóatl, es el primero en el mundo en tener un mural plasmado que evoca las deidades prehispánicas, pero además es el primero en América Latina en operar en México, dentro de un selecto grupo de diez países.
En la presentación de la aeronave, desde el hangar de Aeroméxico, el director general de la firma, Andrés Conesa, recordó que en 2011 se realizó un pedido de 100 aviones a Boeing, con una inversión para su adquisición de 11 billones de dólares.
De estas 100 aeronaves, 99 son del modelo 737 Max y 10 pertenecen al 787-9; el Quetzalcóatl es el primero en recibirse de este paquete, y su compra fue financiada en los mercados de Japón, a tasas bajas, lo que permite que sea más rentable.
“Al tener un balance más sólido, este avión lo financiamos en un Yolko, un mercado en Japón, donde los mejores créditos de las aerolíneas pueden ir, y está financiado a tasas bajas, lo cual permite que el avión sea más rentable en su operación, y los primeros tres que vamos a recibir 787-9 van a estar financiados en estos mercados”, sostuvo el empresario.
Conesa detalló que en los primeros cinco meses recibirán cinco aviones 787, es decir hasta febrero de 2017, que se sumarán a la flota de los 787-8 que ya tienen, con los cuales sumarán 14 Dreamliners.
El inicio de operaciones será en las siguientes semanas con destinos a Los Ángeles, Tijuana, Nueva York, Ámsterdam, Madrid, Paris, Santiago de Chile, Buenos Aires, Sao Paulo, Shanghái y Tokio, esta última ruta sin escalas, vuelo que pocas aerolíneas pueden realizar.
Además se adelantó que se sumaría un destino a Asía, Corea del Sur, una vez que se tengan los permisos requeridos para iniciar la ruta.
Con ello, Aeroméxico competirá a la altura de las grandes aerolíneas europeas, pero además sin incrementar el precio de sus boletos al pasajero por el dólar.
“Tenemos la capacidad de generar ingresos en dólares que compensa el gasto de operación, por ello no incrementarán los precios a los pasajeros; hoy competimos con las grandes aerolíneas europeas al ofrecer precios acorde al producto”, dijo.
El Dreamliner 787-9 se destaca por ser más ligero y amigable con el medio ambiente, comparado con los de su categoría; emite 57 por ciento menos contaminación auditiva en despegue y aterrizaje, consume 23 por ciento menos combustible, lo que representa 20 por ciento menos emisiones de dióxido de carbono.
En su interior, los pasajeros de clase premier pueden hacer uso de un innovador bar, pantallas con acceso a canales de televisión, videos, películas y musicales, conexión Wi Fi, así como asientos con total autonomía.