La Unión Europea anunció que mantendrá en suspenso sus medidas de represalia contra los aranceles de Estados Unidos hasta el 1 de agosto, con el objetivo de seguir negociando con la administración de Donald Trump y evitar una escalada en el conflicto comercial.
La decisión llega tras una carta enviada por Washington en la que advierte que, de no alcanzarse un acuerdo, impondrá un recargo del 30% a las exportaciones europeas.
“Estados Unidos nos ha enviado una carta con medidas que entrarán en vigor a menos que haya una solución negociada, por tanto, también prorrogamos la suspensión de nuestras medidas hasta agosto”, explicó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en una rueda de prensa en Bruselas.
Actualmente, el 70% de las exportaciones europeas al mercado estadounidense están sujetas a aranceles: 50% sobre acero y aluminio, 25% sobre vehículos y autopartes, y 10% sobre otros productos.
La primera ronda de represalias europeas, valorada en 21 mil millones de euros, permanecerá congelada. Una segunda fase, que inicialmente contemplaba sancionar importaciones por 95 mil millones de euros, sigue sin activarse.
Los ministros de Comercio de los 27 se reunirán este lunes en Bruselas para evaluar las tensiones con Estados Unidos, así como con China, y revisar el camino hacia nuevas alianzas con socios comerciales “fiables”, como Indonesia e India.
Durante la reunión también se analizará la ratificación del acuerdo con Mercosur, firmado en diciembre pero estancado por las reservas del Gobierno francés.
A pesar de las presiones, Von der Leyen reiteró que la vía diplomática sigue siendo prioritaria. “Es momento de negociar”, afirmó, aunque advirtió que la Unión está lista para todos los eventuales escenarios. Alemania, Francia, España e Italia respaldan mantener la pausa de represalias mientras haya disposición al diálogo por parte de Washington.
La UE no descarta activar el mecanismo anticoerción para responder a presiones externas, aunque Von der Leyen aclaró que “no estamos ahí aún”. Este instrumento, diseñado para situaciones excepcionales, permitiría responder a intentos de influir en decisiones europeas mediante coerción económica.
Bruselas considera prioritario cerrar acuerdos con socios estratégicos para reducir su dependencia comercial. Fuentes europeas destacaron un reciente acuerdo político con Indonesia y el objetivo de firmar un tratado con India antes de fin de año. También se insiste en avanzar con Mercosur, visto como una oportunidad para compensar parte de las pérdidas provocadas por los aranceles de EU.
Con información de Reuters y Europa Press.
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