La estimación oportuna del Producto Interno Bruto (PIB) de México señalá que éste creció un 0.7 por ciento durante el segundo trimestre de 2025, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Tras la publicación del dato, especialistas dieron a La Razón señales claroscuras sobre el futuro de la economía nacional.
De acuerdo con el Inegi, las actividades secundarias y terciarias, aquellas dedicadas a la industria y al comercio y servicios, registraron un incremento de 0.8 y 0.7 por ciento trimestral, respectivamente. Las actividades primarias, que tienen que ver con el campo mexicano, cayeron un 1.3 por ciento, detalló el Instituto.
- El Dato: especialistas señalan que pese al resultado positivo, la incertidumbre continuará frenando algunas decisiones de consumo e inversión en el país.
En su comparación anual, el PIB oportuno avanzaría 1.2 por ciento entre abril y junio de 2025. En contraste, las actividades primarias avanzaron 4.5 por ciento, mientras que la actividad industrial cayó 0.2 por ciento; en tanto, las actividades terciarias crecieron 1.7 por ciento.
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“La lectura en principio es favorable. Sorprende el resultado al alza, especialmente por las expectativas que se tenían. La economía está siento un poco más resiliente de lo que se tenía previsto”, dijo en entrevista Alejandro Saldaña, economista en jefe de Grupo Financiero Ve Por Más.
Además, agregó que ante este panorama decidieron mantener su estimación del PIB para 2025, que sería de 0.5 por ciento anual.
No obstante, señaló que la incertidumbre aún continuará frenando algunas decisiones de consumo y de inversión en el país. Señaló que en este contexto la generación de empleos se ha estancado. Continuará frenando a la demanda agregada y a la interna, añadió.
- El Tip: en la SHCP pronostican para agosto, una base de crecimiento económico de 0.8 por ciento, lejos del cálculo de expertos.
“Nos preocupa que la economía de Estados Unidos se ha desacelerado. El panorama es que la actividad continuará creciendo pero a tasas más pequeñas”, argumentó Saldaña.
Finalmente, aseguró que esta incertidumbre podría ceder, parcialmente, si se adelanta una revisión oportuna o profunda del T-MEC, por lo que se iría reactivando el gasto en el país, aseguró.
Por su parte, Pamela Díaz Lubet, economista en Jefe de BNP Paribas México, comentó que aunque el crecimiento de 0.7 por ciento en el trimestre fue una sorpresa al alza, varios indicadores siguen apuntando hacia un entorno de bajo dinamismo en la segunda mitad del año.
“El empleo formal se ha mantenido débil por varios meses, las importaciones de bienes de consumo e inversión continúan en niveles bajos y los indicadores de confianza, tanto del consumidor como del empresariado, siguen deteriorándose”, detalló la especialista.
Además, dijo que persisten riesgos importantes en el ámbito comercial y aún no hay claridad sobre cuál será el estado de la relación bilateral que tiene México con Estados Unidos. “El riesgo de una contracción en 2025 sigue presente”, mencionó.
En la misma línea, añadió que la institución financiera que representa contempla una contracción de 0.3 por ciento para este año.
Sin embargo, Rodrigo Mariscal, titular de la Unidad de Planeación Económica de la Secretaría de hacienda y Crédito Público (SHCP), comentó en conferencia de prensa que si está estimación se confirma en agosto próximo, la base de crecimiento de la economía mexicana sería de 0.8 por ciento, lejos del 0.2 por ciento que estima el consenso de especialistas.
Añadió que para que se cumpla el pronóstico, la economía nacional tendría que caer 0.8 por ciento en el segundo semestre de 2025.
“Si hubiera una contracción del PIB, el nivel tendría que caer hasta 1.2 por ciento. Parece difícil que se pueda observar un escenario donde la economía mexicana se contraiga este año o bien que crezca al nivel que prevén los analistas”, concluyó.
