Enfrentar una enfermedad implica no sólo un desafío físico y emocional, sino también un posible reto financiero. Por ello, es fundamental contar con herramientas y una planeación adecuada que permitan mitigar el impacto económico y preservar la estabilidad financiera durante el proceso.
Los gastos relacionados con atención médica, tratamientos, estudios clínicos, desplazamientos, medicamentos y hospitalización pueden consumir rápidamente los recursos personales y familiares, afectando el bienestar integral si no se gestionan con previsión.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) para tener acceso a la salud, además de la seguridad social, también existen dos tipos seguros médicos que ofrecen las aseguradoras: el seguro de salud y el de gastos mayores; aunque también existen otro tipo de herramientas.

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- 63 mil 675 mdp pagaron las aseguradoras en 1T25 por pólizas médicas
¿Qué es un seguro de salud? La AMIS indicó que es un instrumento financiero que ofrece servicios que ayudan a prevenir la salud, y cubre algunos gastos de atención médica que son ocasionados por síntomas o alguna enfermedad que no haya sido diagnosticada.
Un seguro de salud puede ayudar a brindar apoyo financiero para el pago de consultas médicas de medicina general o incluso de algunas especialidades, exámenes clínicos, estudios de laboratorios, orientación médica a distancia, terapias o incluso servicios de traslado en ambulancia.

¿Y un seguro de gastos médicos? También es un producto financiero, pero éste ayuda a solventar los gastos generados por una enfermedad o un accidente para la persona titular de la póliza o incluso para sus beneficiarios.
Este tipo de seguro tiene como propósito ofrecer respaldo financiero ante accidentes, enfermedades o urgencias médicas. Su cobertura se activa en el momento en que se presenta un padecimiento o una situación médica inesperada, y puede incluir servicios como hospitalización, cirugías, medicamentos, tratamientos especializados, aparatos ortopédicos e incluso atención médica en el extranjero, dependiendo del tipo de póliza contratada.
- El Dato: al cierre del año pasado las aseguradoras en México pagaron 25 mil 450 millones de pesos por enfermedades relacionadas al cáncer.
¿Cuál es la diferencia entre ambos? La principal diferencia entre los dos tipos de seguro radica en el enfoque y en su uso; el primero es preventivo y ayuda a monitorear y regular el cuidado de la salud de las personas; además, su costo es menor.
En el caso del seguro de gastos médicos mayores se utiliza cuando ya se tiene un diagnóstico o se presenta una emergencia médica, y brinda soporte financiero para atender accidentes, enfermedades o urgencia. Este tipo de instrumento es útil para quienes viajan con frecuencia o buscan una cobertura más amplia ante situaciones críticas.
¿Qué se debe considerar antes de adquirir o contratar un seguro médico?
• Cuáles son los beneficios y las coberturas: pueden ser desde las formas de pago, que incluye una cobertura amplia, y lo relacionado a los honorarios médicos, medicamentos, gastos hospitalarios, tratamientos, estudios médicos e incluso gastos funerarios.
• Si la póliza será personal o familiar: se puede contratar un seguro personal o uno que incluya a tu cónyuge, hijos o padres.
• Factores que pueden influir en el costo de la póliza: como la edad, sexo, ocupación, tabulador médico, red hospitalaria y la suma asegurada.
• Deducible y coaseguro: los gastos extras que pueden hacer que el costo del seguro se incremente. El deducible es un monto fijo que se debe pagar antes de que el seguro comience a cubrir los gastos; mientras que el coaseguro es el porcentaje que compartes con la aseguradora una vez cubierto el deducible.
En caso de no tener contemplado un seguro de salud, también se puede hacer uso de un fondo de emergencia, realizar inversiones a largo plazo, realizar prevenciones médicas que se incluyan en el gasto mensual, así como fomentar hábitos saludables.
- El Tip: Las compañías de seguros pagan diariamente alrededor de 354 millones de pesos para la protección de enfermedades.
¿Qué es un fondo de emergencia? Es una reserva de dinero que sólo puede ser usada para cubrir gastos imprevistos o situaciones urgentes, en este caso, cuestiones de salud. Su objetivo es proteger la estabilidad financiera sin tener que recurrir a deudas o comprometer los ahorros a largo plazo. Lo ideal es ahorrar entre tres y seis meses de gastos fijos.
¡Inversión a largo plazo! Una solución para enfrentar gastos médicos inesperados puede ser tener un portafolio de inversión que pueda brindarte un alivio y reducir el estrés financiero que provoca una enfermedad o emergencia médica.
Inversión a largo plazo: Siempre es buena idea poner tu dinero a trabajar. Un portafolio de inversión sólido puede representar un alivio financiero importante ante una enfermedad o emergencia médica.
También se puede planificar las revisiones médicas periódicas para prevenir o detectar una enfermedad temprana, lo que hará que la recuperación y el tratamiento sea más eficaz y que los gastos sean reducidos significativamente. Y finalmente, se puede promover la adopción de hábitos saludables como llevar una alimentación balanceada, hacer ejercicio de forma regular y dormir bien.
¿Cuál es la diferencia?
Un seguro de salud puede ayudar a brindar apoyo financiero para el pago de consultas médicas, de medicina general, o incluso de algunas especialidades.
Gastos médicos puede incluir servicios como hospitalización, cirugías, medicamentos, tratamientos especializados.
Diferencia entre ambos. El primero es preventivo y ayuda regular el cuidado de la salud, el segundo se utiliza cuando ya se tiene un diagnóstico o se presenta una emergencia médica.
