Suma asciende a 2 billones de dólares

Acciones de grandes bancos caen tras acusaciones de blanqueo de capitales

A HSBC, Barclays y Deutsche Bank se les señala de mover dinero presuntamente ilícito pese a avisos; el banco ING registra una caída 9.27 por ciento

La prensa reportó 2,100 informes de actividades sospechosas (SAR, por sus siglas en inglés) presentados a la Red de Control de Delitos Financieros de EU (FinCen).
La prensa reportó 2,100 informes de actividades sospechosas (SAR, por sus siglas en inglés) presentados a la Red de Control de Delitos Financieros de EU (FinCen).Foto: Reuters
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Las acciones de grandes bancos como HSBC, Barclays y Deutsche Bank se desplomaban el lunes después de publicarse en prensa que muchos habían movido dinero presuntamente ilícito a pesar de encontrarse con avisos al respecto. 

BuzzFeed News encontró 2,100 informes de actividades sospechosas (SAR, por sus siglas en inglés) presentados a la Red de Control de Delitos Financieros de Estados Unidos (FinCen) y los compartió con el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación y otros canales.

Estos documentos hacen referencia a unos 2 billones de dólares (1.7 billones de euros) de transacciones entre 1999 y 2017. Se trataría de dinero proveniente de la droga y actos delictivos, e inclusive de fortunas malversadas en países en desarrollo.

La investigación apunta sobre todo hacia cinco bancos importantes --JPMorgan Chase, HSBC, Standard Chartered, Deutsche Bank y Bank of New York Mellon-- acusados de haber seguido haciendo circular fondos de presuntos criminales, incluso tras haber sido procesados o condenados por faltas financieras.

En Fráncfort, Deutsche Bank cerró la jornada con una caída de 8.76 por ciento. Standard Chartered, también cayó 5.82 por ciento al final de la sesión en Londres.

Deutsche Bank cerró la jornada con una caída de 8.76 por ciento.
Deutsche Bank cerró la jornada con una caída de 8.76 por ciento.Foto: Reuters

En Hong Kong, el HSBC alcanzó su nivel más bajo en 25 años, perdiendo 5.33 por ciento. Además de que el grupo es citado por la investigación del consorcio de periodistas, podría tener que enfrentar sanciones de China, en el marco de las medidas de represalia contra ciertos países extranjeros.

En Ámsterdam, el banco ING cayó 9.27 por ciento. Según informes de la prensa holandesa, la filial del banco en Polonia apoyó a ciertos clientes a enviar fondos sospechosos fuera de Rusia desde hace años.

El banco francés Société Générale también es objeto de investigación, y se le acusa de falta de transparencia frente a determinados clientes de su filial suiza SGPB. Su acción cayó 7.66 por ciento al finalizar la sesión bursátil en París.

A mitad de la sesión en Wall Street, el gigante JPMorgan Chase había perdido 4.08 por ciento. A su vez, Bank of America cayó en 3.89 por ciento, en tanto Morgan Stanley y Wells Fargo cayeron 4.5 por ciento y 5 por ciento, respectivamente.

El comportamiento de los bancos es menos escandaloso de lo que algunos de los titulares en prensa pueden hacer creer. En lugar de bloquear las posibles transferencias delictivas, se supone que los bancos deben enviar los informes de actividades sospechosas a los organismos reguladores.

Lo anterior se debe en parte a que los sistemas de lucha contra el blanqueo de capitales captan muchas transacciones legítimas: la llamada tasa de "falsos positivos" puede ser de alrededor del 90 por ciento, según un experto. 

Las acciones de HSBC alcanzaron su nivel más bajo en 25 años, perdiendo 5.33 por ciento.
Las acciones de HSBC alcanzaron su nivel más bajo en 25 años, perdiendo 5.33 por ciento.Foto: Reuters

El problema es que las autoridades están inundadas de SAR, ya que solo el FinCen ha recibido casi 700,000 este año. Las notificaciones se amontonan en los organismos reguladores, que cuentan con poco personal, a la espera de ser investigadas o no.

Los bancos podrían mejorar sus sistemas para detectar el lavado de dinero. Por el momento se basan en reglas muy genéricas, como si las transacciones involucran números redondos. Una solución aún mejor sería que los Estados exigieran a las empresas y a los particulares una transparencia total sobre la procedencia y el destino final del dinero.

Eso haría más difícil para los bancos alegar ignorancia sobre la naturaleza de las transacciones que manejan, o argumentar que los competidores les quitarán el negocio si no ejecutan las trasferencias.

Sin embargo, eliminar las complejas redes de empresas ficticias es difícil desde un punto de vista político. Lo más realista es que las diferentes agencias y bancos cooperen más estrechamente. 

En la actualidad, un banco internacional que descubra un rastro de dinero sospechoso que abarque Rusia, Argentina, Reino Unido y Suiza presentaría cuatro informes separados. Los diferentes países probablemente investigarían por separado, y el banco podría no tener recibir noticias de ninguno de ellos.

Estas celosas reservas con la información crea vacíos en los que prospera el delito, como la financiación del terrorismo que se detalla en las últimas filtraciones. 

Con información de Reuters.

JVR