Nuevo golpe de Trump; ahora impone arancel de 31% al acero estructural

Tras darse a conocer que Estados Unidos inició una investigación antidumping contra el acero estructural proveniente de México, las afectaciones a las empresas podrían ascender hasta 500 millones de dólares anuales para las empresas que resulten afectadas, aseveró José Luis de la Cruz, economista y director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y Crecimiento Económico (IDIC).

El Departamento de Comercio de Estados Unidos (DOC, por su sigla en inglés) determinó que México se ha beneficiado con la práctica dumping  (venta de productos por debajo de su precio normal) utilizada para restar competencia y dominar el mercado, a través de la exportación de vigas en I, varillas y viguetas, por lo que decidió imponer medidas arancelarias de 31 por ciento.

En entrevista con La Razón, de la Cruz consideró que es injustificable para el país cobrarle por exportar este material, debido a que las empresas no tienen la capacidad de incrementar sus costos allá. Indicó que desde hace siete años, se ha intentado limitar la entrada al mercado de Estados Unidos productos derivados de este material, lo cual es una medida “proteccionista” y no de competitividad.

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“El dumping no es posible para México, porque las empresas no tienen apoyo estatal en precios de energía o esquema fiscal que los beneficie al grado de poder vender más barato en el país que en Estados Unidos; incluso enfrentan costos muy elevados, inseguridad y una serie de factores que limitan hasta dónde se puede manipular el precio, para ganar competitividad de manera ilegal”.

Asimismo, precisó que aunque los impactos dependerán de las compañías, pueden ser pérdidas de entre 300 y 500 millones de dólares anuales. “A nivel nacional habrá un impacto moderado, pero a nivel local, sobre todo en el norte, el monto puede representar la rentabilidad de la compañía”.

La investigación que sustenta la medida surgió a partir de un reclamo del Instituto Estadounidense de Acero para la Construcción de Chicago en febrero pasado.

En 2018, las importaciones de acero estructural provenientes de Canadá, China y México fueron de 722.5 millones de dólares, 897.5 millones y 622.4 millones, cada uno.

Por su parte, el Gobierno de México, a través de la Secretaría de Economía, manifestó que continuará apoyando a las empresas nacionales involucradas en el procedimiento antidumping, y participando activamente en el procedimiento antisubvenciones.

“Es importante destacar que este procedimiento de investigación no está relacionado con la investigación que condujo el DOC sobre el acero y el aluminio bajo la Sección 232, la cual se refiere a Seguridad Nacional de Estados Unidos, de cuyos aranceles México y Canadá fueron excluidos el 20 de mayo de 2019, después de amplias negociaciones con ese país”, aseguró en un comunicado.

Cabe recordar que no es la primera vez que México es acusado de estas prácticas: hace unas semanas se llegó a un acuerdo para que los productores de tomate mexicano no fueran sometidos a investigación y así que no pagaran aranceles del 17.5 por ciento; aunque se inspeccionará 92 por ciento de sus exportaciones, luego de que Estados Unidos propusiera una revisión completa.

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