Proveedoras de limpieza analizan cortar relaciones con la administración pública por recortes del gobierno federal

Proveedoras de limpieza que emplean a por lo menos 220 mil afanadores, analizan cortar relaciones contractuales con la administración pública, debido al recorte del 15% que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) aplicó al gremio.

A pesar que el salario mínimo ha aumentado más de 60% de 2019 a la fecha y que los precios han ascendido como resultado de la creciente inflación, desde 2021 el gobierno federal ajustó a la baja los precios de referencia para los pagos en cada latitud del país.

De acuerdo con fuentes del gremio que prefirieron el anonimato, la situación se ha vuelto insostenible, por lo que no solo están en riesgo los miles de trabajadores directos, se calculan afectaciones para al menos un millón de personas si se considera a sus dependientes económicos.

“Por un lado hemos cumplido con nuestras responsabilidades al atender los crecimientos en el salario mínimo, que ha pasado de 102 pesos en 2019 a 172 pesos en el año en curso; sin embargo, por otra parte absorbemos las alzas en costos de materiales y equipo, que ha traído consigo la inflación, además del ‘ajuste’ que Hacienda hizo de manera unilateral, sin existir un estudio de mercado, y sin explicación a las más de cien empresas registradas en el Contrato Marco desde el 14 de octubre de 2021”, expresaron en una carta enviada a este medio.

Asimismo, los inconformes presentaron documentación en la que se puede leer que la cotización pasó de 14 mil 388 pesos a 12 mil 805 pesos mensuales en la zona de la frontera, es decir, se le restó 10.9%; mientras que en el resto del país la baja fue de 10 mil 584 pesos a 8 mil 996 pesos, lo que representa una caída de 15%.

“Nos encontramos ante una encrucijada conscientes de la importancia de las labores de aseo para las sedes del gobierno; sin embargo, debemos velar por los derechos de nuestros miles de trabajadores y si continuamos en las condiciones actuales, quedaríamos impedidos para cumplirlos, ya que no solo nos enfrentamos a los aumentos salariales ya registrados, sino al que inminentemente se aplicará a partir de este 1 de enero, así como a los incrementos inflacionarios de nuestros productos”, precisaron.

Según datos de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, a partir del 1 de enero de 2019 se realizaron los primeros ajustes al salario, al asentar el general en 102.68 pesos y el de la zona fronteriza en 176.72 pesos.

Para el 2020, incrementó a 123.22 pesos el salario general y 185.56 pesos el fronterizo; en 2021, el salario alcanzó los 141.70 y 213.39 pesos, respectivamente; mientras que en 2022 llegaron a 172.87 pesos y 260.34 pesos, en cada uno de los casos, por lo que solo en este último año el alza fue de 22%, algo que incluso se anunció como el incremento más alto de los últimos 34 años.

En tanto, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se ubicó en 8.53% durante la primera quincena de octubre, lo que significa el tercer registro a la baja; no obstante, el indicador rebasa por más del doble el objetivo del Banco de México del 3%, el cual se ha fijado como meta permanente de inflación anual.