La verdad es lo de menos. Lo importante es la narrativa. De uno y otro polo de nuestro espectro político, simplista y llano, por cierto. Es lo que tenemos y en ello nos debatimos.
Asesinaron, con todo y protección municipal y federal a Carlos Manzo, singular alcalde de Uruapan, Michoacán.
Pasaron horas antes de un posicionamiento oficial. Antes mejor —o sea peor— desde Estados Unidos condenaron la indómita violencia que pervive, en esa y otras regiones del país a gobiernos de los tres niveles, producto de cepas priistas, perredistas, panistas o morenistas.

Reconocimiento al Ejército
Justo el fin de semana posterior a la presentación en Palacio Nacional poco valorada, aplaudida o reconocida de estadísticas a la baja de índices delictivos por parte de la súper Secretaría de Seguridad Ciudadana, ocurre el magnicidio.
La narrativa de avance en el eje violencia-legalidad-seguridad, cayó abatida. Entonces vino la reacción; una articulación discursiva para hacer notar que todo viene de la maldita guerra de Felipe Calderón.
Todos, cuatroteístas o conservadores, corruptos o mañosos, evaden contextos, omiten personajes y líneas de tiempo. Simplificación del mensaje y de pensamiento. La realidad no se hace con verdades vinculadas, se imagina e impone con narrativas, propaganda y altavoces, convencionales y digitales.
La debilidad estructural de instituciones federales, estatales y municipales muestra una vez más su avatar violento y aterrador. Los esfuerzos serios y cotidianos se pierden detrás del mensaje, fueron Calderón y Peña.
Enfrente, una corrupta, débil y reactiva oposición opta por acusar de montaje —distractor— el acoso del que fue víctima la Presidenta Sheinbaum. Lo condenable es el frágil dispositivo de seguridad de la mandataria, sus lentos reflejos, la exposición de la Jefa de Gobierno y Estado.
La verdad no importa, vivimos entre una narrativa oficialista y el meme opositor.
EN MORELOS la seguridad de la gobernadora Margarita González Saravia y tres presidentes municipales se mantiene bajo protocolos nacionales, informó el secretario de Gobierno, Edgar Maldonado.
El titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Miguel Ángel Urrutia Lozano, dio a conocer que continúan los operativos contra los delitos de extorsión, venta de drogas, robo a mano armada, a casa-habitación y de vehículos, principalmente en las zonas oriente y sur del estado. Como resultado, se han detenido a 28 presuntos implicados y se mantienen investigaciones en curso por secuestro en flagrancia.
En materia de prevención, se anunció que continuará la videovigilancia en la ciudad de Cuautla para fortalecer la protección ciudadana y fomentar la confianza en la denuncia. Además, para evitar la comisión de delitos dentro de los centros penitenciarios, se han realizado 18 revisiones en las que se incautaron dosis de drogas introducidas de forma ilegal.
Con el objetivo de reforzar los controles de seguridad en los penales, el próximo año se instalarán equipos de rayos X que permitirán detectar y frenar el ingreso de sustancias psicotrópicas, avanzando así en la estrategia integral de seguridad y reinserción social en Morelos.

