SPLIT FINANCIERO

Alstom impulsa la reactivación del tren de pasajeros en México

Julio Pilotzi. *Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón. Foto: La Razón de México

Alstom consolidó su posición como actor clave en la movilidad ferroviaria de pasajeros en México tras adjudicarse un contrato con la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario para el suministro de 47 trenes DMU, destinados a los corredores Ciudad de México–Querétaro–Irapuato y Saltillo–Monterrey–Nuevo Laredo.

El proyecto, anunciado el 15 de diciembre, se inscribe en el Plan Nacional de Desarrollo 2025-2030 y representa uno de los avances más relevantes en la recuperación del transporte ferroviario de pasajeros en el país, al conectar regiones estratégicas del centro y norte con soluciones modernas, eficientes y de largo alcance. El contrato, valuado en aproximadamente 20,200 millones de pesos, no se limita al suministro del material rodante. Incluye un esquema integral que abarca mantenimiento por cinco años, equipamiento de talleres, estaciones de inspección y repostaje, capacitación técnica y la puesta en servicio de los trenes.

Este enfoque de ciclo completo fortalece la viabilidad operativa del proyecto y garantiza estándares elevados de disponibilidad, confiabilidad y control de costos, elementos clave para la sostenibilidad financiera del sistema ferroviario. El acuerdo tiene un impacto significativo en la economía nacional. Más de tres cuartas partes del contenido de los trenes se fabricará en México, impulsando la cadena de suministro local, el desarrollo de proveedores especializados y la generación de empleos calificados en ingeniería, manufactura y gestión de proyectos. La planta de Ciudad Sahagún, Hidalgo, será el eje productivo del proyecto, reafirmando su papel como el mayor centro de fabricación de Alstom en América y uno de los más importantes a nivel global, con una trayectoria en la producción ferroviaria.

En términos tecnológicos, los trenes Adessia Stream ofrecen una solución alineada con las tendencias internacionales de movilidad regional y suburbana. Diseñados para operar sin catenaria, alcanzarán velocidades cercanas a los 165 km/h y permitirán configuraciones flexibles mediante acoplamiento, adaptándose tanto a servicios de larga como de corta distancia. La propuesta combina eficiencia operativa, capacidad escalable y una experiencia de viaje moderna, con altos estándares de accesibilidad, información en tiempo real y confort para los usuarios.

El componente de mantenimiento y operación refuerza el valor estratégico del contrato. Alstom aportará su experiencia global en gestión de activos ferroviarios, respaldada por sistemas predictivos como HealthHub, que permiten optimizar el desempeño de las flotas, reducir consumos energéticos y anticipar fallas. Este enfoque tecnológico contribuye a maximizar la rentabilidad del proyecto y a minimizar riesgos operativos a lo largo del tiempo, un factor determinante para la consolidación del tren de pasajeros como alternativa frente a otros transportes.

Además de los aspectos industriales y operativos, el proyecto integra una visión de identidad y diferenciación que refuerza su posicionamiento público. El diseño de los llamados Trenes del Norte incorpora referencias culturales mexicanas y una estética contemporánea que busca proyectar modernidad, dinamismo y orgullo regional, elementos que pueden fortalecer la aceptación social del servicio y su percepción como infraestructura estratégica de largo plazo.

El contrato adjudicado a Alstom marca un punto de inflexión para el sector ferroviario mexicano. Combina inversión relevante, contenido nacional, transferencia tecnológica y una solución integral que abarca desde la fabricación hasta la operación. Para el entorno de negocios, el proyecto no solo representa un impulso a la movilidad, sino también una señal clara del papel que México puede desempeñar como plataforma industrial ferroviaria de clase mundial y como mercado clave para el desarrollo de infraestructura de transporte moderna y sostenible.

Este posicionamiento se ve reforzado por el reconocimiento oficial “Hecho en México”, otorgado a Alstom en 2025, que certifica que los trenes son diseñados, fabricados y ensamblados en el país bajo altos estándares de calidad e innovación. El distintivo subraya el compromiso de la compañía con el fortalecimiento de la industria nacional y consolida a México como un centro estratégico para la fabricación ferroviaria de alcance global, alineando desarrollo industrial, generación de valor local y visión de largo plazo para la movilidad del país.

Agua en redes. El déficit estructural de acceso al agua en México sigue profundizándose: más del 65% del norte del país enfrenta sequía extrema y uno de cada tres hogares carece de infraestructura básica para el almacenamiento, según datos de Conagua. Ante esta presión, Rotoplas implementó “Rotogotas de Ayuda”, un modelo de filantropía digital que convierte cada like, comentario o compartida en redes sociales en una donación directa de tinacos para comunidades afectadas. Estos recipientes permiten a las familias almacenar agua cuando hay suministro y sobrevivir durante los cortes, algo vital en zonas con racionamientos constantes. Esta iniciativa, coordinada con CENACED, combina trazabilidad, focalización territorial y participación ciudadana, en un momento en que las empresas del sector agua son observadas por su capacidad de innovación técnica, y por su respuesta social frente a la emergencia hídrica.

Voz en off. La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) emitió un llamado a revisión para 5,937 camionetas de la automotriz japonesa Mazda en México, una acción que vuelve a exponer a la compañía a un escrutinio regulatorio y comercial en un momento de fuerte competencia dentro del segmento de SUV. La falla, relacionada con el software del módulo de control de la carrocería, provoca que el indicador de combustible muestre un nivel superior al real, elevando el riesgo de que los vehículos se queden sin gasolina durante la conducción y sufran un apagado inesperado del motor. Aunque Mazda realizará la inspección y, en su caso, la actualización del software sin costo para los propietarios de las CX-70 modelo 2025 y CX-90 de 2024 y 2025, el llamado a revisión representa un impacto negativo para la marca al evidenciar debilidades en sus procesos de desarrollo y control de calidad, además de implicar costos operativos adicionales, posibles afectaciones a la confianza del consumidor y presión sobre su posicionamiento comercial en un mercado donde la confiabilidad tecnológica y la seguridad son factores clave de decisión de compra…

Temas: