Debut del Tri de Jaime Lozano

TIEMPO DE COMPENSACIÓN

*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón
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La selección mexicana comenzó su participación en la Copa Oro con dos contundentes victorias frente a Honduras y Haití, un par de rivales que dejaron mucho que desear en todas las facetas del juego.

Jaime Lozano desplegó a los mismos once futbolistas en ambos encuentros. Se nos cumplió el deseo a muchos, pues Edson Álvarez finalmente se desempeñó como central. No obstante, esto fue debido a la suspensión de César Montes, quien usualmente ocupa esa posición. Jimmy optó por buscar fluidez en el centro con los mediocampistas de Pachuca, Luis Chávez y Erick Sánchez. Sin embargo, usualmente juegan en un doble pivote en su club, ahora, Luis Romo ha comenzado como contención en medio de ellos.

El futbolista del Monterrey tuvo buenas actuaciones, pero está claro que su mejor versión se desbloquea cuando puede fungir como llegador, no necesariamente en la creación de la jugada, sobre todo si el recurso de ataque principal es el centro lateral. Aun así, Romo ha demostrado su capacidad para destacar en distintos roles y posiciones.

En ambos partidos, México busco sobrecargar el costado derecho para amenazar el arco rival, utilizando a Antuna cómo un extremo tradicional, con un Jorge Sanchez que sufre atracando en último tercio, ocupando el carril interior. Frente a Honduras hubo más variedad, ya que Orbelín Pineda apareció constantemente desde el lado izquierdo, más como mediapunta.

Hubo secuencias prometedoras con balón en el segundo tiempo frente a Haití, donde el conjunto nacional logró progresar el esférico desde atrás, a través de combinaciones por dentro para atraer al rival y finalmente buscar el espacio por fuera, lo cual terminó en las dos últimas anotaciones del Tri. También hay que resaltar los centros de Antuna y la definición de Santi Giménez, a lo Erling Haaland.

Es cierto que fueron dos rivales débiles y que hubo lapsos cuestionables en defensa junto con varias oportunidades de gol desperdiciadas. Sin embargo, me parece un comienzo aprobatorio con ideas claras y un plan reconocible. Considerando que Estados Unidos y Canadá traen equipos suplentes, creo que México está obligado a levantar el trofeo y hasta el momento, va por el camino correcto.