Otra batalla ganada por la Reina del Pacífico

“Ya no sé qué es lo peor, la política o el narco”

Sandra Ávila Beltrán

Sandra Ávila Beltrán, la llamada Reina del Pacífico sigue ganando batallas, después de que salió libre de la cárcel, al ser declarada no culpable por los cargos de narcotráfico y asociación delictiva en los Estados Unidos, y únicamente fue condenada de apoyar económicamente a una persona ligada al narcotráfico, por lo que fue condenada a 70 meses de prisión, siendo liberada el 7 de febrero de 2015.

La Reina del Pacífico, era sobrina de Miguel Ángel Félix Gallardo, el llamado Jefe de Jefes, por lo cual creció en el ambiente de la alta sociedad del narco, habiendo vivido en Guadalajara, Jalisco, en Hermosillo, Sonora, y fue detenida saliendo del Vips de San Jerónimo, en el sur de la Ciudad de México, en donde se supone que llevaba una vida tranquila y de bajo perfil.

La vida de Sandra Ávila Beltrán, se comenta que fue la inspiración para que Arturo Pérez Reverte, escribiera la famosa novela titulada La Reina del Sur, quien con la asesoría de su amigo el escritor Elmer Mendoza, conocedor de la cultura del narco mexicano, desarrolló la trama de la novela, y debido a su gran éxito comercial, se derivó la serie del mismo nombre, protagonizada por la actriz Kate del Castillo, y realizada por Netflix, obteniendo el mismo gran éxito que el libro.

Sandra Ávila Beltrán emprendió en septiembre del año 2022 otra batalla legal, ahora contra la plataforma Netflix y contra Telemundo Network Group, por el uso ilegal de su imagen, en la promoción de la segunda temporada de la serie La Reina del Sur, por lo que el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) resolvió a su favor, en el procedimiento administrativo marcado con el número de expediente IMC/150/2022, por el uso de una imagen de Sandra Ávila Beltrán, donde tiene un sombrero de palma, aretes, totalmente maquillada y con una blusa de tirantes, la cual es una fotografía de su vida privada, y no es de uso público, como lo hicieron creer las demandadas.

Después de haber ganado el procedimiento administrativo en el IMPI, con una condena de pago de cinco millones de pesos, y con base en la resolución, como prueba del uso de su imagen con fines de lucro y sin su autorización, Sandra Ávila Beltrán inició una demanda por daño moral en contra de Netflix y Telemundo Network Group, en la cual pide hasta el cuarenta por ciento de las ganancias por la transmisión de la serie La Reina del Sur, por utilizar una imagen privada de ella, lo que le causó un desprestigio y un daño moral, al representarla como una narcotraficante, situación por la que no fue condenada en la sentencia que cumplió y no se puede tener por acreditada esta situación.

La Reina del Pacífico, con un olfato para los negocios, ingresó a las redes sociales con gran actividad, e incluso, con varias entrevistas sobre su vida, el emprender la demanda millonaria nos muestra que cualquier persona, incluso quien haya sido condenada por un delito, puede demandar por el uso indebido de su imagen, abriendo una ventana para que las figuras públicas del narco sigan la misma vía de las demandas por el uso de su imagen, las cuales cada día son más representativas de una cultura narco en el mundo, donde todo puede ser negocio.