Narcosubmarinos manejados por GPS

Si algo han logrado hacer los narcotraficantes a lo largo del tiempo, es cada día volverse más sofisticados en el trasiego de droga.

Y si algo les preocupa a estos criminales es que se logren decomisos, no sólo por la droga, sino por la detención de quien la transporta.

Por cada cargamento decomisado, hay por lo menos 10 que han llegado a su destino y miles de dosis se han podido distribuir. Pero cuando alguien es detenido y tiene que declarar, vulnera la seguridad de estos criminales.

A estos narcotraficantes les interesa principalmente Europa. La ganancia es mucho más alta que si ingresan esa misma droga a Estados Unidos.

Autoridades de España han detectado un nuevo método para introducir droga a su país y de ahí distribuirla al resto de Europa y es con submarinos operados por GPS. Es decir, sin tripulación alguna.

Son semi sumergibles, utilizados para trasladar cocaína, metanfetamina, hachís y mariguana al viejo continente.

Las autoridades de España han fortalecido el trabajo de inteligencia para detectar el ingreso de drogas a su país y han realizado operativos muy puntuales en sus costas para detectar estos submarinos.

Se trata de un método que poco a poco es más utilizado y con el que los grupos criminales intentan ir un paso adelante de la policía.

Los grupos criminales han encontrado por vía marítima nuevas rutas para traficar droga, para ello, usan esos semi sumergibles elaborados de forma artesanal que son controlados vía remota con un GPS, algunos incluso van escoltados con drones.

Un equipo como éste fue confiscado el pasado 4 de julio, en la denominada Operación Kraken, en la que detuvieron a ocho personas en municipios de Cádiz, Málaga y Barcelona, seis de los cuales permanecen en prisión provisional. Entre los sospechosos están un padre y un hijo, quienes se dedicaban a fabricar los semi sumergibles.

Nuevo método para trasladar droga

Las investigaciones de esta red se iniciaron en abril del 2021, cuando la Policía francesa alertó a la española, que en Cádiz había una organización importante que suministraba vehículos con “caletas” para transportar droga.

Los investigadores han detectado hasta 13 vehículos de distinto tipo a los que se les habrían practicado de forma artesanal dobles fondos para ocultar y transportar drogas, algunos de ellos fabricados en el interior de remolques y capaces de llevar hasta 800 kilos.

Los cargamentos procedían de Colombia, Brasil y Ecuador y la conexión era un grupo de narcotraficantes de Francia, que tienen a bandas locales en otras partes de Europa para que les lleven la droga a París.

El uso de submarinos se ha utilizado ya hace varios años, lo nuevo de algunas de estas naves es que se pueden manejar por GPS, pero submarinos para trasladar droga se han detectado hace tiempo.

Recordemos que en noviembre de 2019 detectaron un gran cargamento de drogas en un submarino, el mayor golpe hasta ese momento, cuando transportaba tres mil kilos de cocaína, fue localizado en una playa de Pontevedra. Ante la llegada de policías, la tripulación hundió la embarcación deliberadamente.

Ese cargamento contenía una pureza superior al 80%, que hubiera generado más de 123 millones de euros a los cárteles.

Los detenidos fueron llevados al banquillo de los acusados, la fiscalía pidió condenas de hasta 13 años de cárcel y multas por 300 millones de euros, pero la investigación, concluida en tiempo récord, no consiguió llegar a la cúpula de la red, ni a proveedores ni a receptores.

El uso de estos transportes artesanales en Sudamérica y México lleva más de dos décadas. Es la vía preferida de los cárteles mexicanos y colombianos, porque es difícil detectarlos y son muy prácticos al igual que las avionetas para mover la droga. Pero con los submarinos las distancias por recorrer pueden ser mucho más largas.

Los grupos criminales adaptan embarcaciones para el tráfico de cocaína de Sudamérica a costas de Guatemala, luego a México con destino final hacia Estados Unidos.

Prueba de ello fue el reciente cargamento de mil 680 kilos de cocaína decomisado en la alcaldía de Gustavo A. Madero en la Ciudad de México, la droga fue enviada por mar desde Colombia e introducida a través de las costas de Puerto Escondido, en el estado de Oaxaca.

Ya en territorio mexicano fue transportada en dos tractocamiones y a su entrada en la capital del país fue detectada, al revisar las unidades, quedaron al descubierto los compartimentos donde ocultaban la droga.

En ese momento, cuatro personas fueron detenidas, tres eran originarias de Durango y la otra de Sinaloa, lo que advierte de la presencia del Cártel de Sinaloa en la Ciudad de México.

El secretario de Seguridad Ciudadana de la CDMX, Omar García Harfuch, indicó que este decomiso es el más relevante realizado en esta urbe, donde también se han realizado operativos para desarticular al Cártel Jalisco Nueva Generación.

La ruta del Pacífico es una de las más importantes para los cárteles mexicanos y colombianos, de acuerdo con un reporte de la Casa Blanca al menos 85% de la cocaína que ingresa al mercado estadounidense se trafica por trillos marítimos de América Latina en el Pacífico y el Caribe.

De enero del 2019 hasta agosto del 2020, se incautaron 50 de estos semi sumergibles usados para el tráfico de cocaína, en costas colombianas y en aguas internacionales.

Mientras que, en agosto del 2018, desmantelaron una red dedicada a la fabricación de submarinos para transportar droga desde el pacífico de Colombia hasta Centroamérica y Estados Unidos. El Cártel de Sinaloa era uno de los clientes que trabajaba con estos fabricantes.

Además, el pasado 8 de enero, en la ciudad de Medellín, detuvieron a Óscar Moreno Ricardo, alias El rey de los semi sumergibles. Señalado de ser uno de los mayores responsables de la salida de cocaína por las costas del Pacífico colombiano.

En este mes de julio, a El rey de los semi sumergibles, le incautaron 22 bienes por más de siete mil millones de dólares y está a la espera de su extradición a Estados Unidos.

Con el avance de la tecnología, también se modernizan las técnicas para el trasiego de droga.