Mucho más que una materia prima

JUSTA MEDIANÍA

*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Por:

El agua es un elemento fundamental para la vida y un sinfín de actividades humanas. ¿Cuál es su valor? Es incalculable. Es clave para la vida humana, la producción de alimentos y es un elemento fundamental en todas las industrias.

En un hecho extraordinario, en diciembre del 2020, el agua comenzó a cotizar como otras materias primas en la bolsa de Estados Unidos. Así como el oro, el petróleo, la plata y otros elementos, el agua participa del mercado. A lo largo de los más de dos años de cotización, su precio se ha incrementado de manera importante y sostenida: a principios del 2021, su precio era de 499 dólares; hoy en día, su cotización ronda los 980 dólares, prácticamente duplicando su precio.

El valor de su cotización se incrementará, en la medida en que la escasez se agudice, las sequías se alarguen y la disponibilidad disminuya.

Al 15 de marzo, más del 70 por ciento del territorio nacional presentaba algún grado de sequía, quedando sin afectación el sureste de nuestro país y algunos manchones en el territorio noroeste de México. Los frentes fríos registrados en la primera quincena del tercer mes del año trajeron lluvia por arriba del promedio.

A pesar de ello, la crisis toca a nuestra puerta. Entre los hallazgos que prenden las alarmas se encuentran algunas presas de nuestro país que rozan su nivel más bajo de su historia, colonias y comunidades de nuestro país que cumplen semanas sin agua y el bajo nivel del Sistema Cutzamala, encargado de dotar gran parte del agua que consume la Ciudad de México.

Ante la situación de escasez y sequía por la que atraviesan distintos puntos del territorio nacional, las autoridades generan estrategias emergentes para paliar sus efectos, entre los que destacan el bombardeo de nubes, buscando incentivar la lluvia que permita incrementar la disponibilidad de agua.

El pasado 22 de marzo se conmemoró el Día Mundial del Agua, jornada que se lleva a cabo desde 1993, dedicada a crear conciencia entre los individuos acerca del valor del agua y las medidas que debemos implementar para su cuidado. La conmemoración ha centrado sus esfuerzos en acelerar el cambio para resolver la crisis del agua y su saneamiento. Mucho que aprender y desarrollar ante un recurso clave para nuestra existencia cada vez más comprometido.

Nuestro sistema preserva problemáticas de raíz sumamente difíciles de resolver. En distintas regiones de nuestro país continuamos importando agua desde tierras lejanas para nuestro consumo. Continuamos también utilizando agua potable para prácticamente todos los servicios, sin ser una cualidad realmente necesaria para ellos. Preservamos la deficiencia en el saneamiento del agua una vez que la utilizamos y gastamos una gran energía en el proceso, para finalmente utilizarla para regar hortalizas y/o contaminar tierras, cuerpos de agua y el subsuelo.

A esperar que llueva y a trabajar arduamente por modificar el modelo de uso y consumo del agua, en la búsqueda de preservar mucho más que una materia prima, siendo el agua el recurso más importante y valioso, del cual depende la vida humana.