Protestas universitarias se multiplican por la libertad de Palestina

DESDE EUROPA

Héctor Badillo*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Héctor Badillo
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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Las manifestaciones de estudiantes universitarios en contra del genocidio en Gaza siguen creciendo en Estados Unidos a pesar de la represión de las autoridades y ya se extienden a otros países de Europa y de América.

La libertad de Palestina ya no sólo se pide en Estados Unidos, donde miles de jóvenes han salido a las calles durante semanas para reclamarle a su gobierno el continuo apoyo a la invasión de Israel en la franja de Gaza.

Más de 2 mil personas han sido detenidas en estas marchas propalestinas en un país que se dice defensor de la libertad de expresión y acusa a los jóvenes de ser antisemitas.

Tres importantes universidades estadounidenses fueron el epicentro de estas marchas en contra del genocidio en Gaza: la Universidad de Columbia en Nueva York, la Universidad Estatal de Portland y la Universidad de California en Los Ángeles, y son sus estudiantes los que han sufrido la represión de la Policía.

La acción del gobierno estadounidense en contra de los jóvenes manifestantes y algunos profesores no ha pasado desapercibida y ha hecho que las protestas propalestinas se extiendan en universidades de otras partes del mundo como España, Francia, Canadá, México, Australia, Reino Unido y Japón.

Los movimientos estudiantiles son una parte fundamental del reclamo social ante las injusticias y son el motor de agentes de cambio en toda la sociedad. Estas manifestaciones ya se han comparado con lo que ocurrió durante la guerra de Vietnam, cuando la juventud salió a las calles para manifestarse en contra de la guerra.

La iniciativa de la juventud estadounidense despertó estos movimientos estudiantiles que tienen como objetivo realizar acampadas pacíficas en los espacios universitarios y que, en su mayoría, piden dejar de invertir en las empresas que apoyan a Israel y la guerra en Gaza.

Como siempre ha pasado en la historia reciente, los movimientos estudiantiles incomodan a los gobiernos y al poder, y es por ello que las autoridades tachan estas marchas de racistas y antisemitas, a pesar de que no es un movimiento en contra de Israel sino en contra del genocidio en Gaza y a favor de la libertad de Palestina.

Resulta alentador ver que la gente joven reaccione a estas injusticias cobijadas por las grandes potencias en contra de la población civil. Desde la Organización de las Naciones Unidas hasta los campus universitarios se ha exigido un alto al fuego, pero el gobierno de Israel se niega a interrumpir los ataques a pesar de las miles de muertes y la destrucción que ha dejado prácticamente inhabitable esa zona del mundo.

No hay nada de extraño en que los estudiantes se levanten para defender el derecho a la vida y apoyen a una sociedad que está sufriendo, lo extraño sería que no hubiera estos actos de apoyo a Palestina y a sus habitantes, así como el rechazo al genocidio israelí.