El mercado ilegal de armas en México

DESDE EUROPA

Héctor Badillo.
Héctor Badillo.La Razón de México
Por:

La industria de las armas se ha beneficiado directamente de la violencia y la inseguridad que se vive desde hace décadas en México gracias a la complicidad de gobiernos corruptos y en muchos casos de la alianza con la delincuencia y el narcotráfico.

En Alemania, el Tribunal Superior Federal ratificó una sentencia en contra de la empresa productora de armamentos Heckler & Koch por exportar de manera ilegal armas a territorio mexicano. Sin escrúpulos y sin vergüenza, la empresa alemana traficó armas que llegaron a manos de la delincuencia organizada mexicana, que tanto daño hace en el país. La multa a esta empresa europea fue de 3 millones de euros, una fuerte cantidad que no es equiparable con el daño que causa en México el tráfico ilegal de armas.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró, en una de sus conferencias matutinas, que ya se investigan los delitos perpetuados con estas armas, que entraron de manera ilegal, para fincar responsabilidades a quienes estén involucrados en esta práctica irresponsable que fortalece a los grupos delincuenciales y aumenta la amenaza constante en contra de la sociedad mexicana.

La regulación de esta industria debe ser más férrea, poniendo al principio de la cadena a las víctimas del uso de armas de fuego y las leyes deben regular la exportación de armamentos no sólo en México, sino en todo el mundo, más en países que sobreviven a conflictos bélicos y de inseguridad.

Actualmente en Alemania ya se establece un debate sobre esta regulación, necesaria ante las laxas medidas que permiten falsear información sobre el contenido real de las exportaciones y el usuario final de estos productos altamente peligrosos.

Éste es un caso más de una larga lista de países implicados en la venta y entrada ilegal de armamento a nuestro territorio, como la inepta e irresponsable estrategia denominada “rápido y furioso” durante el gobierno de Felipe Calderón, en donde agencias estadounidenses introdujeron armamento ilegal que llegó a manos del crimen organizado y fue todo un fracaso que solamente benefició a la delincuencia.

Detrás de esta industria millonaria hay empresas poderosas que influencian las decisiones legislativas en los países fabricantes que se benefician de esta producción armamentista.

En medio de esta venta y compra de armas no se toma en cuenta el impacto de la llegada de armamento a un territorio que sufre la inseguridad y la delincuencia y mucho menos en las víctimas de esta inseguridad que sigue causando dolor a México y a sus ciudadanos.