¡Elijo creer! La vida extraterrestre y los avistamientos de sus naves (comúnmente clasificadas en la categoría de objetos voladores no identificados, ovnis) son parte inseparable de la cultura popular actual. Por ello, este 2 de julio celebramos el Día Mundial del OVNI.
Desde hace decenas de años, escuchamos una y otra vez la idea de que existen civilizaciones más avanzadas e inteligentes fuera de la Tierra, que nos visitan de vez en cuando en sus platillos voladores, aunque los líderes globales se esfuercen por ocultarlo.
¿Será verdad? ¿No estamos solos en el universo? Probablemente nunca lo descubriremos. Lo que sí sabemos es que cada año, la conspiración ovni nos deja cientos de películas, cómics, series, pósters y otros aportes invaluables a la cultura popular.
Por ello, celebramos hoy el Día Mundial del OVNI, pero ¿por qué esta fecha? Te contamos.
¿Por qué se celebra el Día Mundial del OVNI el 2 de julio?
¿Están entre nosotros? No lo sabemos. Sin embargo, es indudable que las imágenes de los aliens y los ovnis son parte fundamental de la cultura popular.
El fenómeno ovni contemporáneo comenzó a mediados del siglo anterior, al mismo tiempo que se popularizaron nuevos medios de comunicación, como la televisión y el periódico, capaces de mostrar imágenes y contar historias atractivas para la población.
Además, el contexto histórico favoreció la aparición de la leyenda de visitantes extraterrestres: Estados Unidos invertía cada vez más en crear arsenal aéreo (lo que favoreció el avistamiento de aviones desconocidos) e, incluso, apuntaba a llegar al espacio antes que su rival la Unión Soviética. Las historias de invasores externos también fueron populares en un contexto en que la sociedad Occidental temía una “invasión” del comunismo.
En este contexto, un 2 de julio de 1947, ocurrió uno de los eventos más significativos para la comunidad aficionada a los avistamientos de naves de otro planeta: el incidente de Roswell.
Nos cuenta la historia que ese día se registró la caída de una misteriosa aeronave en un rancho cerca de Roswell, en Nuevo México.
La prensa, anonadada, lo reportó como un accidente de una nave a la que clasificaron de “misteriosa”, pues no se habían encontrado restos humanos y las piezas halladas en el lugar de los hechos no correspondían a ningún avión comercial o militar conocido hasta el momento.
Desde entonces se generó el rumor de que lo que cayó ese día en Roswell fue un platillo alienígena, y que el Gobierno de Estados Unidos recuperó a sus tripulantes extraterrestres para estudiarlos y analizarlos con fines científicos. Todo en secreto, para no asustar a la población.
Pero ¿es esto verdad? Hasta el momento, no se conoce una versión oficial del caso Roswell, sin embargo, la hipótesis más aceptada es que se trató de la caída de una innovadora aeronave del Gobierno estadounidense con la que buscaban espiar los ensayos nucleares de la URSS. El proyecto fue ejecutado en secreto, por lo que la forma de los vehículos usados para este fin era muy rara y no coincide con la de ningún otro avión.
Sin embargo, el caso Roswell permanece como uno de los más importantes para la comunidad aficionada a los avistamientos extraterrestres, por lo que el 2 de julio fue nombrado Día Mundial del OVNI.
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