Con la reciente aparición del caso de una entrenadora de orcas que fue asesinada por uno de los animales con los que trabajaba, de nombre Jessica Radcliffe avivó la discusión sobre los espectáculos con animales y revivió otros casos similares, como el de Dawn Brancheau.
Los accidentes con orcas o animales marinos son aterradores y no son nada raros. Las orcas, así como los tiburones y los delfines, son animales muy grandes y visualmente atractivos, pero también muy peligrosos, por lo que, a lo largo de la historia, se han documentado varios casos de ataques a entrenadores.

Sin embargo, en 2010 ocurrió un caso que dejó una marca imborrable en la comunidad de aficionados de la fauna marina y de los espectáculos con animales, el cual dejó de manifiesto que el apodo de “ballena asesina” que se le da a las orcas no es casualidad.
Dawn Brancheau, la entrenadora de orcas que murió en un espectáculo
La comunidad aficionada a la biología marina recuerda su nombre con dolor: Dawn Brancheau, fallecida a los 40 años por un trágico accidente con la orca Tilikum.

Según fue reportado en su momento, Dawn Therese Brancheau trabajaba como entrenadora de orcas y su show con estos animales era parte de la residencia del parque acuático SeaWorld Orlando.
Una tarde del 24 de febrero de 2010, Brancheau bajó a la monumental piscina de SeaWorld Orlando para dar el tradicional show con la orca Tilikum, donde guiaba a este animal a brincar, rodar y ejecutar todo tipo de acrobacias para el deleite del público.

Sin embargo, en un movimiento inesperado, Tilikum apresó entre su hocico el cabello y brazo de la entrenadora, lo cual, al nunca haber ocurrido con anterioridad, hizo que ésta entrara en pánico.
En ese momento, Tilikum jaló con todas sus fuerzas a la mujer al fondo de la piscina, lo cual, por sí mismo, le provocó heridas graves: fractura de mandíbula, costillas y una vértebra cervical, además del desgarre del brazo que capturaron las fauces de la orca.

Sin embargo, esto no fue lo que terminó de privar de la vida a Brancheau, sino que, además, la orca tardó en liberar a la mujer, lo que provocó que ella se ahogara.
Alrededor de 45 minutos después, Tilikum expulsó el cuerpo de la mujer, donde sus compañeros se dieron cuenta de que había perdido la vida.
El caso de Dawn Brancheau fue el hilo conductor del documental Blackfish de 2013, el cual se centra en narrar cómo el cautiverio de los animales marinos los daña psicológicamente y los convierte en criaturas peligrosas.
Por cierto, el video del accidente de Dawn Brancheau fue captado en video para la televisión y es posible verlo a través de la plataforma YouTube en ESTE ENLACE, pero se recomienda discreción, pues son imágenes que pueden resultar susceptibles para algunas audiencias.
Tilikum ya había sido responsable de otros accidentes
Tilikum, que falleció en 2011 a causa de una neumonía, ya había levantado advertencias por su comportamiento agresivo.
Particularmente, se le señaló como la principal sospechosa de la muerte del hombre Daniel P. Dukes, quien, una noche de 1999, se habría colado en las instalaciones de SeaWorld Orlando y habría caído accidentalmente en la piscina donde descansaba Tilikum, quien lo habría intentado devorar.

Anteriormente, una estudiante de nombre Keltie Lee, había sido la primera víctima de Tilikum. Cuando hacía sus prácticas en el balneario Sealand of the Pacific, accidentalmente resbaló en una piscina, solo para ser encontrada y agredida por la orca, lo cual le provocó heridas mortales.
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