SENSUALES suburbios espectrales

SENSUALES suburbios espectrales
Por:
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Ernesto Lozano

A partir del sábado 10 de septiembre se exhibe en la Galería Tal Cual, la muestra Suburbios Espectrales, de los artistas Mónica Escutia y Rubén Méndez. En cada obra colocada en la sede de la Colonia Roma se reflejan las inquietudes de estos artista y los momentos que viven.

La mayor parte del trabajo de Mónica Escutia está realizado a partir de procesos que implican la menor intervención del trabajo manual. Dibujos de formas geométricas o de figuras aleatorias realizadas en corte láser sobre acrílico, y esculturas en formas que aparentan piedras o formas orgánicas de gran solidez con acabados en pintura automotriz, son elementos que confieren a la obra de Escutia ciertas reminiscencias del arte minimalista. A pesar de eso su obra en general, principalmente las esculturas, posee una sutil incorporeidad conferida por la brillantez, que detona sus cualidades de objeto y reflejo del entorno. Al contrario del frío minimalismo, Escutia logra trasmitir sensualidad en sus piezas a través de sus formas y acabados.

Mónica está en constante cambio, su obra es una apresurada evolución, pues ella se niega al encasillamiento.

Rubén Méndez parte de la pintura en un intento por desentrañar las posibilidades de la misma. Los elementos con los que dota sus imágenes cumplen la función de distender lo canónico con que históricamente se ha relacionado esta disciplina.

De su trabajo se desprende una iconografía cuyos componentes no tienen correspondencia en el sentido convencional; así pues, podemos pensar que el trabajo de Méndez alude a la disección de la pintura, constriñéndola al concepto de organismo en descomposición. De esta manera se vuelve reconocible en términos posmodernos con todo lo que esto implica:

suciedad, caos, confusión y pastiches. El rechazo de lo homogéneo como premisa creativa, interés divago por formas y cánones históricos, son algunos de los elementos que prevalecen en sus piezas.

Rubén es artista, promotor cultural en Guadalajara, además de manejar un espacio de artes plásticas. Un pintor que siempre parte de la idea de no quedar seducido o tentado por lo ya establecido.

En La Razón conversamos con Mónica Escutia y Rubén Méndez en exclusiva sobre la muestra que inauguraron en la Galería Tal Cual, que se ubica en la calle Colima Nº 326 A, en la Colonia Roma norte de la ciudad de México y que estará abierta al público hasta el próximo 12 de noviembre.

¿Cómo se unen artísticamente Mónica y Rubén para este proyecto? Rubén Méndez. (R.M.) Tenemos una relación de amistad, de trabajo y colaboración; Mónica es parte de los artistas que exponen en mi espacio de artes visuales. Nos conocimos hace un año en una colectiva donde estaba exponiendo junto a Mónica y de ahí surge este proyecto que presentamos ahora en la Galería Tal Cuál, de la ciudad de México.

¿Cuál es el punto de unión y de acomodo que tienen sus obras en esta propuesta? R.M. Son de orden formal, conceptual, partimos de un mismo origen; Mónica es de Mazatlán, ella tiene mucho tiempo viviendo en Guadalajara, donde hay una especie de estética geográfica que se alimenta, haciendo una referencia coloquial, esto lo puedo ejemplificar con la torta ahogada, que es de chile, pan y carne de cerdo, lo más minimalista como alimento, a pesar de su importancia, pues resulta que esta especie de asunto minimalista contemplativo se vuelve en algo característico de la zona, convirtiéndose en una eventualidad presente en el ambiente y en el mundo del arte. Pienso que es esa la principal relación que tienen nuestras obras.

Mónica Escutia. (M.E.) Los minimalistas tenían un concepto de producción de obra en el estricto sentido de que eran procesos que entre más alejados de la manualidad se volvían más importantes. En mi obra existe, pero no es un asunto que tenga que ver directamente con esos procesos o esas tradiciones de contemporaneidad, yo parto de limitar mis elementos visuales a planos y a colores, volviéndose parte de ese espíritu que sí es muy de Guadalajara. Hago mis piezas manualmente, con un mecanismo combinado de lo manual y lo industrial. Las formas circulares que hice para esta exposición tienen por ejemplo, un trabajo en flexigrass con cortes láser, algo más industrial. Al igual que el de las piedras, que están compuestas por capas de resinas y fibras de vidrio, hasta terminar con la capa final de pintura automotiva. En mi propuesta es como si los círculos se hubieran fugado y sufrieran una transformación en una figura más orgánica y tridimensional, es como abarcar más, no quedarme en un plano, con cada pieza que son únicas, sin moldes, todas trabajadas a mano.

¿Cómo es el proceso creativo que opera en ustedes como artistas? M.E. Yo no tengo una regla o una fórmula: de pronto puedo pensar en algo, en una idea o puedo hacer un dibujo, unos bocetos. Igual al trabajar modifico las piezas, no me gusta crear con fórmulas para no encasillarme y no quedar con algo preconcebido. Cuando traigo una idea y quiero hacerla cuerpo no me guío por dinámicas establecidas.

R.M. Yo parto de la pintura. Tengo una preocupación por el manejo del espacio. Como imparto cursos a gente muy joven, de repente estoy pensando que es lo que sigue a continuación, en la obra Sin Título, de este año, (que es en óleo sobre tela, con zíper, neón, metal y plástico y que mide 240 x 300 cm), son como tres piezas que estaban sueltas y que de repente me pareció que todo el grupo de obras se iba convirtiendo en una especie de elemento orgánico, mi obra siempre está en proceso de gestación y me gusta la idea de cómo ensamblarlos y organizarlos. Como también soy museógrafo, siempre estoy preocupado por el aspecto que tiene que ver con la distribución espacial, también con la historia del arte. El cuestionar las posibilidades y llevar el soporte a situaciones y circunstancias que lo pongan en una nueva condición diferente, por la idea de partir de la premisa de no quedar seducido o tentado por lo ya establecido, una especie de rebeldía personal, de qué es lo que está sucediendo y cómo se maneja el material, también hay una lectura escrita que dentro del trabajo considero sicótico.

Voy de un elemento a otro y de una forma a otra indiscriminadamente, sin la idea del cuestionamiento del porqué debo hacerlo pero tratando de cuidar la acción de que esté aportando o sesgándose de eso que ya existe, una idea pretenciosa pues te das cuenta de que es imposible, porque ves artistas que ya hicieron esto o lo otro, aunque espero que en lo retiniano se alcance a percibir y que trabaje en el otro sentido de ver que es lo que está sucediendo en el orden conceptual.

¿Es Suburbios Espectrales un proyecto regional? R.M. Tal Cual ha ampliado la mirada y está trabajando con artistas que no son de esta región, porque los sistemas se vuelven endogámicos, La simple idea de cambiar su estructura tiene mucho sentido, por eso este proyecto nos parece muy importante presentarlo a partir del aspecto regional, dado el antecedente que tiene la Galería Tal Cual que asume este reto o responsabilidades, esperamos que haya una especie de recepción de cosas en el aspecto formal de lo que eventualmente se ve por estos lados, porque siempre es enriquecedor.

¿Con esta muestra podremos tener una visión de lo que se está haciendo en esa región? R.M. En el arte, el flujo y el intercambio de información en una discusión que sabemos se tiene que dar.

¿Qué proyectos tienen en puerta? M.E. Estamos preparando una muestra en Puerto Vallarta en el marco de los Juegos Panamericanos y otra que presentaremos en Buenos

Aires, Argentina, y una participación con una galería en Zúrich.

¿Qué papel han de asumir los artistas en la recomposición del tejido social a propósito de la situación de guerra que vivimos en determinadas partes de México? R.M. Leía recientemente que la filosofía y la tragedia surgen en Grecia, como una manera de contraposición. Una situación como la que vivimos tiene que llevarnos a un punto de reflexión que se vuelva importante, que a lo mejor no nos va a sacar, pero arrojaría luz del por qué nos está sucediendo esto, creo que a los intelectuales y a los artistas les corresponde esta actitud, no sé si esclarecedora, pero si burlona, sarcástica.

No necesariamente tiene que ser gráfica, pero si hay que hacer alusión constante porque nos corresponde; en estas circunstancias tenemos que seguir creando, trabajando, no podemos parar, tenemos que seguir abogando por la interpretación y la reflexión de la realidad. En el arte hay críticos que hablan de situaciones que son de terror, de querer establecer sistemas de interpretaciones que son totalitarios, no se puede trabajar así, esto es una discusión que hay que abrir a los terrenos de lo estético, de lo social, dándole relevancia a lo que estamos haciendo.

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